Bloquean la CA-4 en contra de represa El Tablón
Santa Bárbara, Honduras — 28 de julio de 2025
La carretera internacional CA-4 fue nuevamente bloqueada este lunes a la altura del puente sobre el río Cañas, en el municipio de Quimistán, Santa Bárbara, por pobladores de diversas comunidades que rechazan la construcción de la represa multipropósito El Tablón.
Desde las primeras horas de la madrugada, miembros del Comité de Defensa de los Bienes Comunes de Quimistán y del Consejo Indígena Inca del Valle de Quimistán iniciaron una toma pacífica, portando pancartas, banderas de Honduras y consignas en defensa del agua, la tierra y sus derechos ancestrales.
“No más represas sin consulta”
Los manifestantes denuncian que el proyecto amenaza con inundar al menos cinco comunidades, desplazando a más de 2,150 personas y destruyendo más de 3,400 manzanas de tierra fértil. Además, acusan al gobierno de impulsar el proyecto sin realizar la consulta previa exigida por el Convenio 169 de la OIT.
“Nos quieren inundar, nos quieren borrar del mapa”, expresó Luis Alejandro Arita, vocero del Comité, quien también criticó la falta de estudios socioeconómicos y ambientales adecuados.
Tensión y presencia policial
La protesta, que comenzó de forma pacífica, fue disuelta por la Policía Nacional alrededor de las 9:00 a.m., tras el despliegue de una tanqueta y un contingente de más de 500 agentes. Durante el operativo, se reportaron al menos cuatro personas heridas y dos detenidos.
A pesar del desalojo, los líderes comunitarios advierten que continuarán movilizándose hasta que el gobierno suspenda el proyecto y se abra un diálogo transparente con las comunidades afectadas.
Un conflicto que escala
El proyecto El Tablón, financiado por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), contempla obras complementarias para mitigar inundaciones en el Valle de Sula. Sin embargo, los pobladores de Quimistán denuncian que se está sacrificando su territorio en nombre del desarrollo ajeno.
“Este no es un rechazo al progreso, sino a la imposición”, declaró Adalid Martínez, uno de los líderes de la protesta. “Queremos soluciones que respeten la vida, la tierra y la dignidad de nuestras comunidades”.
La lucha por el valle de Quimistán continúa, mientras el país se enfrenta a una encrucijada entre desarrollo hídrico y derechos territoriales. ¿Será escuchada la voz de las comunidades antes de que se coloque la primera piedra en octubre?
