Expertos cuestionan datos oficiales sobre COVID-19 y piden transparencia
San Pedro Sula, 28 de julio de 2025 — Un grupo de especialistas nacionales e internacionales ha puesto en duda la veracidad de los datos sobre COVID-19 proporcionados por la Secretaría de Salud de Honduras, en medio de un repunte de contagios que ha llevado al gobierno a imponer medidas como el teletrabajo, la suspensión de clases presenciales y el uso obligatorio de mascarilla.
Medidas sin respaldo científico
El doctor Marco Tulio Medina, reconocido científico hondureño y coordinador del Centro Colaborador de la OMS en el país, criticó duramente las decisiones gubernamentales, señalando que no están respaldadas por evidencia epidemiológica ni por criterios científicos sólidos. “Una positividad del 7% no está por encima de los parámetros internacionales”, afirmó, comparando la situación con países como Estados Unidos y España, que reportan tasas similares o superiores sin haber recurrido a restricciones tan severas.
Medina también reveló que se ha consultado a 25 expertos de América Latina, Europa, Estados Unidos e India, quienes coinciden en que no existe justificación estadística para medidas como el confinamiento parcial y el cierre de escuelas.
Llamado a auditoría internacional
Ante la falta de claridad en los datos, el doctor solicitó una auditoría internacional que permita verificar la información oficial. “Si los criterios no se están cumpliendo, entonces se está manipulando la información”, advirtió, exigiendo que los datos sean presentados de forma transparente y evaluados por expertos de la OMS.
Impacto emocional y escasez de insumos
Medina también alertó sobre el impacto psicológico y económico de las medidas, especialmente en un contexto donde ya se reporta escasez de mascarillas en farmacias. “Desde las neurociencias sabemos que esto reactiva recuerdos traumáticos. No podemos afectar la salud mental, la economía ni la educación sin estar seguros del camino que se toma”, expresó.
La ministra de Salud, Carla Paredes, defendió las decisiones adoptadas y respondió con dureza a las críticas. En una entrevista pública, calificó de “ignorantes” e incluso “imbéciles” a quienes cuestionan las medidas, asegurando que el aumento de casos justifica el confinamiento y la suspensión de clases.
Paredes insistió en que el esquema de vacunación debe completarse y que el uso de mascarilla es esencial para cortar la cadena de contagio. Sin embargo, no presentó datos concretos que respalden las decisiones tomadas.
