El presidente estadounidense Donald Trump está presionando a Ucrania para que acepte una nueva propuesta de paz basada en amplias exigencias rusas, dando a Kiev hasta el 27 de noviembre para decidir si acepta las demandas o pierde el apoyo estadounidense.

Esta iniciativa representa el último intento de Trump por poner fin a la guerra total contra Rusia , que ya se acerca a su cuarto año, y como dijo el presidente Volodymyr Zelensky el 21 de noviembre: «Ucrania pronto podría enfrentarse a una decisión extremadamente difícil: o la pérdida de dignidad o el riesgo de perder a un socio clave».

El Kyiv Independent analiza por qué esta nueva ofensiva estadounidense es diferente en cuanto a contenido, plazos y personas que la impulsan.

En el centro de la propuesta de Trump se encuentra una amplia concesión territorial: Ucrania entregaría toda la región oriental de Donbás , tanto las zonas ocupadas por Rusia como las partes que aún controlan las tropas ucranianas.

Si bien Rusia ha ocupado casi todas las aldeas del óblast de Luhansk, Ucrania sigue controlando partes importantes del óblast de Donetsk, incluidas ciudades clave como Pokrovsk , Sloviansk y Kramatorsk.

Según el plan, las fuerzas ucranianas se retirarían de estas áreas restantes, que luego serían designadas como zona desmilitarizada.

El territorio sería reconocido internacionalmente como perteneciente a Rusia, aunque las tropas rusas tendrían prohibido entrar en la zona.

El marco también prevé el reconocimiento de facto del control de Rusia sobre Crimea , Luhansk y Donetsk, no por parte de Ucrania, sino de Estados Unidos. (kyivindependent.com)