EE.UU. pide respetar el trabajo de la OEA y no intentar maniplar la voluntad de los hondureños
Tegucigalpa, 30 de noviembre de 2025.– La Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado de Estados Unidos se pronunció este domingo sobre la jornada electoral en Honduras, resaltando la amplia participación ciudadana y llamando a respetar el trabajo de la Misión de Observación Electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA).
En un mensaje publicado en la red social X, la oficina señaló: “Seguimos de cerca las noticias sobre la gran participación electoral de hoy en Honduras para las elecciones generales. Ahora, permitamos que la Misión de Observación de @OAS_official haga su trabajo para que todos los involucrados tengan confianza en que los resultados de las elecciones reflejan la voluntad del pueblo hondureño y no las manipulaciones de quienes intentan frustrarla”.
.@WHAAsstSecty: Estamos siguiendo de cerca las noticias sobre la gran participación de votantes hoy en Honduras 🇭🇳 para las elecciones generales. Ahora, permitamos que la misión de observadores de la @OEA_oficial haga su trabajo, para que todas las partes involucradas puedan… https://t.co/xTHW1LpvTZ
— U.S. Embassy Tegucigalpa (@usembassyhn) December 1, 2025
Contexto internacional
El pronunciamiento se da en medio de una jornada marcada por largas filas en los centros de votación y un ambiente de expectativa sobre los resultados preliminares que el Consejo Nacional Electoral (CNE) dará a conocer en las próximas horas.
La presencia de observadores internacionales, entre ellos los enviados por la OEA y la Unión Europea, busca garantizar transparencia y confianza en un proceso considerado decisivo para el futuro político del país.
Dimensión del proceso
Más de 6.5 millones de hondureños están habilitados para votar en estas elecciones generales, en las que se elige al presidente de la República, 128 diputados al Congreso Nacional, 20 representantes al Parlamento Centroamericano (Parlacen) y 298 alcaldes municipales.
El respaldo de Washington a la labor de la OEA refuerza la presión internacional para que los resultados reflejen fielmente la voluntad popular y se eviten intentos de manipulación en un proceso clave para la democracia hondureña.
