Rocío Tábora, exministra de Finanzas de Honduras, se ha sometido nuevamente a una evaluación médica por parte del equipo de Medicina Legal del Ministerio Público. Tábora enfrenta un juicio por presunto fraude en la compra de siete hospitales móviles, valorados en 47,5 millones de dólares, durante la pandemia de la COVID-19.

Inicialmente, Tábora fue enviada a prisión, pero debido a su condición médica, su defensa legal logró que continuara el proceso en libertad. Sin embargo, un juez ha dictado nuevamente la medida de prisión preventiva para la exfuncionaria.

La Corte de Apelaciones emitió un comunicado en el que indica: “manda que se imponga la medida cautelar de prisión preventiva a la acusada Rocío Izabel Tábora Morales, por suponerla responsable a título de cómplice necesario, de un delito consumado de fraude en perjuicio del Estado de Honduras”.

Tábora fue capturada en noviembre de 2023 cuando presuntamente intentaba salir del país por un punto fronterizo con Nicaragua. Debido a problemas de salud, el Juzgado de Criminalidad Organizada y Corrupción le concedió arresto domiciliario en lugar de prisión, con la prohibición de salir del país y la obligación de firmar periódicamente un libro de control en el juzgado.

Hoy, Tábora se somete nuevamente a exámenes médicos para comprobar su estado de salud y apelar la decisión de la prisión preventiva. Esta evaluación médica es crucial para determinar si puede continuar el proceso en arresto domiciliario o si deberá ser trasladada a prisión. La situación de Tábora sigue siendo un tema de alto interés público, ya que el caso refleja las medidas judiciales en casos de corrupción y manejo indebido de fondos durante la pandemia.

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