La gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Noem, designada por el presidente electo Donald Trump para liderar el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), compareció el viernes ante los senadores en su audiencia de confirmación. Durante su intervención, Noem prometió implementar con firmeza la visión del presidente republicano, centrada en combatir la inmigración ilegal y reforzar la seguridad fronteriza.

Noem, excongresista y gobernadora en dos períodos, aseguró estar comprometida con medidas que incluyen la deportación masiva de migrantes, la eliminación de programas como CBP One y la reinstauración de políticas de la era Trump, como la obligación de los solicitantes de asilo de esperar en México sus audiencias migratorias. Además, priorizará la deportación de migrantes con antecedentes penales y limitará programas como la libertad condicional humanitaria.

La gobernadora sustituiría al actual secretario Alejandro Mayorkas, criticado por los republicanos por el aumento de migrantes en la frontera sur. Aunque Noem cuenta con el respaldo de senadores republicanos como Rand Paul, algunos demócratas, como Richard Blumenthal, expresaron dudas sobre su capacidad para dirigir una agencia tan crucial para la seguridad nacional.

Noem también subrayó su intención de reformar el Servicio Secreto y agilizar las respuestas de la FEMA ante desastres naturales, destacando su experiencia en la gestión de emergencias como gobernadora.

De ser confirmada, Noem enfrentará desafíos significativos en un Departamento cuya misión abarca desde la protección fronteriza hasta la seguridad cibernética y la respuesta a desastres.