Clausura de los Juegos Olímpicos en París: Un cierre lleno de emoción y cultura
Tras dos semanas y media de intensas competiciones deportivas, París dio por concluidos sus Juegos Olímpicos en una grandiosa ceremonia de clausura celebrada este domingo. El evento estuvo cargado de referencias a la rica cultura francesa y con la mirada puesta en Los Ángeles 2028.
Estados Unidos triunfa en el medallero
Estados Unidos se alzó como el gran vencedor en el medallero, tras 19 días de competiciones que tuvieron a la capital francesa como escenario de lujo, con sus emblemáticos monumentos como la Torre Eiffel, los Inválidos y los jardines de Versalles.
Emotiva extinción del pebetero
El pebetero, un anillo de siete metros de diámetro que ardía en el jardín de las Tullerías desde la inauguración el 26 de julio, se extinguió simbólicamente cuando el nadador Léon Marchand, héroe francés de estos Juegos, se llevó la llama olímpica en una pequeña lámpara dorada.
Ceremonia en el Estadio de Francia
La llama olímpica se trasladó al Estadio de Francia, donde 70.000 espectadores abarrotaron las gradas para presenciar el desfile de atletas olímpicos de las 205 delegaciones, ondeando orgullosas sus banderas y luciendo las medallas conquistadas.
Un cierre musicalmente francés
La ceremonia estuvo impregnada de clásicos de la canción francesa, con interpretaciones de artistas locales como Zaho de Sagazan y temas como «Sous le ciel de Paris» y «Emmenez-moi».
Toque ‘hollywoodiense’
El cierre contó con una secuencia futurista y emotiva, con la figura del ‘viajero dorado’ descendiendo del cielo para redescubrir el espíritu olímpico, acompañado por la música del himno de Apolo interpretado en un piano suspendido y vertical.
El legado para Los Ángeles 2028
La ceremonia culminó con expectativas para los próximos Juegos Olímpicos en Los Ángeles en 2028, con la presencia anunciada de figuras como el rapero Snoop Dogg y el actor Tom Cruise, en un guiño hacia la próxima sede olímpica.
Con una duración de aproximadamente dos horas y media, la clausura de los Juegos Olímpicos en París dejó un legado de emoción, cultura y deportividad que resonará hasta Los Ángeles 2028.