Las primeras celebraciones de Año Nuevo arrancaron este miércoles en los países del Pacífico, que dieron la bienvenida al 2026 tras un 2025 marcado por la frágil tregua en Gaza, el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y un clima global extremo que dejó incendios, sequías e inundaciones en distintos continentes.

El Pacífico abre el calendario del 2026

Kiribati y Samoa fueron los primeros territorios en recibir el nuevo año, seguidos por Nueva Zelanda, donde Wellington iluminó su cielo con un espectáculo de fuegos artificiales que congregó a miles de personas en la costa.

En Sídney, autoproclamada “capital mundial del Año Nuevo”, los preparativos avanzan bajo un ambiente de duelo y máxima seguridad. Hace apenas dos semanas, un ataque armado durante una fiesta judía en la playa de Bondi dejó 15 muertos, la peor masacre en Australia en tres décadas.

Aun así, se espera que cientos de miles de personas colmen el puerto para presenciar las nueve toneladas de pirotecnia programadas. Desde temprano, residentes y turistas comenzaron a ocupar los muelles y a posicionar veleros frente a la Ópera.

“Los fuegos artificiales siempre han estado en mi lista de cosas que hacer antes de morir y estoy muy feliz de estar aquí”, dijo la turista inglesa Susana Suisuikli, emocionada por vivir la celebración australiana.

Fiestas masivas en América y Europa

Las celebraciones se replicarán en las próximas horas en ciudades como Nueva York, Edimburgo —con su tradicional festival Hogmanay— y, especialmente, en la playa de Copacabana, en Río de Janeiro, donde se espera la mayor fiesta del planeta: 2,5 millones de personas.

El evento incluirá conciertos en tres escenarios, encabezados por Gilberto Gil, un espectáculo de 1.200 drones y el tradicional show de fuegos artificiales sobre el Atlántico.

En Ciudad de México, la verbena popular reunirá a cientos de miles de personas en medio de la incertidumbre económica.
“La esperanza que tengo es que vengan personas a invertir y haya fuentes de trabajo”, expresó Enrique Flores, pensionado de 61 años.

En Argentina, la crisis económica convive con la ilusión del Mundial 2026.
“Tengo mucha fe en que Argentina vuelva a repetir esa hazaña tan grande”, dijo Celeste Meza, empleada de limpieza.

Un año marcado por tensiones políticas y fenómenos globales

2025 dejó estampas tan diversas como la moda mundial de las muñecas Labubu, el robo de joyas en el Louvre de París y el regreso del grupo de K-pop BTS. También estuvo marcado por la muerte de figuras como la zoóloga Jane Goodall, el papa Francisco —sucedido por León XIV— y el activista estadounidense Charlie Kirk, cuyo asesinato profundizó las divisiones políticas en su país.

El retorno de Trump a la presidencia de Estados Unidos reconfiguró la agenda internacional. Su ofensiva arancelaria generó turbulencias en los mercados y su política migratoria intensificó las deportaciones hacia América Latina.

“Este no es el final, este es el principio”, dijo Pedro Gómez, indígena maya de 29 años, recién deportado a Guatemala en uno de los últimos vuelos del año.

Washington también incrementó su presencia militar en el Caribe y endureció las restricciones a petroleros vinculados a Venezuela, elevando la tensión con Caracas.

Gaza: un alto al fuego que no borra la devastación

Tras dos años de guerra, la presión estadounidense facilitó un frágil alto al fuego entre Israel y Hamás. Sin embargo, la población palestina continúa enfrentando condiciones extremas.

“Esperamos que esta pesadilla termine en 2026”, dijo Hanaa Abu Amra, desplazada en Ciudad de Gaza. “Lo mínimo que podemos pedir es una vida normal: que vuelva la electricidad, que las calles se restablezcan”.

2026: Mundial, Luna y expectativas

El nuevo año estará marcado por dos grandes hitos: el Mundial de Fútbol en Estados Unidos, México y Canadá, y el esperado retorno de la humanidad a la Luna, más de medio siglo después de la última misión Apolo.

Mientras tanto, el planeta avanza hacia el 2026 con celebraciones, incertidumbres y la esperanza de que el nuevo ciclo traiga más estabilidad que el convulso año que termina.