El asesor presidencial Gilberto Ríos solicitó el lunes 24 de marzo de 2025 al fiscal general, Johel Zelaya, que inicie una investigación contra el exdiputado Carlos Zelaya, tras aparecer en un video de 2013 reunido con integrantes de la organización criminal Los Cachiros.

El material, revelado en septiembre de 2024 por InSight Crime, generó una fuerte controversia en Honduras, afectando la imagen del gobierno de Xiomara Castro, cuñada de Zelaya.

En una entrevista en el programa Detrás de la Noticia de TSI, Ríos afirmó: «Nosotros seríamos los más interesados en que comenzaran esas investigaciones y que se hicieran públicas. El propio Carlos Zelaya se ha puesto a disposición de la fiscalía, así que si la investigación no ha comenzado, que inicie, y si es necesario que sea pública, que lo sea». El asesor subrayó la urgencia de esclarecer el caso, que ha mantenido al país en debate siete meses después de la divulgación del video.

Libre se desvincula de Zelaya

Ríos insistió en que el partido Libertad y Refundación (Libre) no tiene relación con las acciones de Carlos Zelaya, quien dejó de formar parte del partido el 10 de septiembre de 2024, según el Tribunal de Honor de Libre. «Que se haga lo que se tenga que demostrar de que nosotros no tenemos ningún vínculo como partido, ni nuestra vida política depende de ninguna forma de Carlos Zelaya», aseguró.

Además, destacó que él y Zelaya no compartían la misma línea de trabajo dentro de la organización, y que las actividades de Libre siempre se financiaron con «esfuerzos populares» y sin grandes recursos, descartando nexos con fondos dudosos.

¿Qué revela el video?

El video muestra a Carlos Zelaya en una reunión con miembros de Los Cachiros, quienes ofrecieron 650,000 dólares para apoyar la campaña de Libre en 2013. Tras su difusión, Zelaya admitió su participación, pero afirmó que desconocía la identidad de los narcotraficantes en ese momento. Un día antes de que el video saliera a la luz, el 2 de septiembre de 2024, Zelaya renunció como diputado y primer secretario del Congreso Nacional.

El escándalo desató reacciones como la de Gabriela Castellanos, directora del Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), quien exigió la renuncia de Xiomara Castro. La presidenta, por su parte, rechazó las acusaciones y denunció un supuesto complot para desestabilizar su gobierno. A la fecha, el caso sigue siendo un tema candente, con crecientes demandas de transparencia y avances en las investigaciones.