El Grupo Santa Inés, una de las principales empresas camaroneras en Honduras, anunció su cierre definitivo tras 32 años de operaciones debido a la caída en las exportaciones hacia Taiwán, profundizada por la ruptura de relaciones diplomáticas entre ambos países en marzo de 2023.

Impacto económico y laboral

Antonio Cano, gerente general del Grupo Santa Inés, confirmó que la empresa, ubicada en la aldea Santa Elena, Choluteca, cerrará sus puertas debido a la pérdida del mercado taiwanés, donde mantenían 12 clientes desde hace dos décadas. Esto provocó el cierre de 1,500 empleos en fincas y la planta empacadora.

En 2023, las exportaciones de camarón de Santa Inés se desplomaron un 96%, pasando de 7.5 millones de libras a solo 284,114 libras en 2024. La producción total también se redujo drásticamente, cayendo de 10.5 millones de libras en 2022 a menos de 500,000 libras en 2024, según datos de la Asociación Nacional de Acuicultores de Honduras (Andah).

Pérdidas millonarias y falta de apoyo

Además, la empresa enfrentó problemas económicos por un crédito fiscal de 2.5 millones de dólares que aún no ha sido resuelto por el gobierno, sumado a la falta de acceso a financiamiento favorable. “Nos vamos del país y venderemos todo”, lamentó Cano, quien destacó que la imposición de un arancel del 20% al camarón hondureño por parte de Taiwán, tras la ruptura diplomática, hizo insostenible la operación.

Crisis en la industria camaronera

El cierre de Santa Inés se suma a una crisis generalizada en la industria camaronera hondureña. Según Andah, las exportaciones a Taiwán, que en 2022 alcanzaron 29 millones de libras, cayeron a 9.3 millones en 2024, lo que ha llevado al cierre de 56 fincas camaroneras en el país.

Santa Inés, que alguna vez lideró la exportación de camarón en Honduras, deja un vacío significativo en el sector y marca un golpe económico para una región dependiente de esta industria.(con información de diario elheraldo)