Argentina expresó su firme rechazo a la decisión del presidente venezolano Nicolás Maduro de revocar unilateralmente la autorización concedida a Brasil para representar sus intereses y custodiar sus instalaciones diplomáticas en Caracas.

El Ministerio de Relaciones Exteriores argentino emitió un comunicado en el que advirtió al gobierno venezolano sobre la necesidad de respetar la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, que garantiza la inviolabilidad de las misiones diplomáticas.

La controversia estalló entre la noche del viernes y la mañana del sábado, cuando opositores al régimen de Maduro informaron sobre un estado de «asedio» en la Embajada de Argentina en Caracas, que estaba bajo protección de Brasil desde la expulsión de la misión diplomática argentina. La sede alberga actualmente a seis asilados argentinos.

La Cancillería argentina denunció que patrullas de los servicios de inteligencia y fuerzas de seguridad venezolanas rodean la residencia oficial en Caracas, tras la revocación de la autorización de Brasil para custodiar el inmueble.

Magalli Meda, una de las refugiadas, reportó a través de la red social X que la electricidad en la residencia ha sido cortada y que los accesos están «tomados» por la policía. Omar González, otro asilado, confirmó la falta de electricidad durante la noche del viernes.

En respuesta a esta situación, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina advirtió que cualquier intento de intromisión o secuestro de los asilados en la residencia oficial será severamente condenado por la comunidad internacional.

El Ministerio también destacó que estas acciones refuerzan la percepción de que en la Venezuela de Maduro no se respetan los derechos humanos fundamentales.

El gobierno argentino, bajo la administración de Javier Milei, agradeció a Brasil por su compromiso y responsabilidad en la custodia de los inmuebles argentinos en Venezuela y expresó su reconocimiento a la “hermana República Federativa del Brasil” por su apoyo en la protección de los intereses argentinos.

Por su parte, Brasil manifestó su sorpresa ante la decisión del gobierno venezolano y recordó en una nota oficial el carácter de “inviolabilidad” de las misiones diplomáticas, conforme a la Convención de Viena.

El gobierno brasileño aseguró que continuará con la custodia y defensa de los intereses argentinos hasta que Argentina designe a otro Estado aceptable para asumir esa responsabilidad.

Desde agosto, Brasil se encarga de la custodia de las sedes diplomáticas de Argentina y Perú en Venezuela, así como de la representación de sus intereses y ciudadanos, tras la expulsión de las legaciones de ambos países por rechazar la proclamación de Maduro como vencedor en las elecciones del 28 de julio.