Este sábado, un mercadillo navideño en Magdeburgo, Alemania, fue escenario de un trágico atropello, resultando en la muerte de al menos dos personas, un adulto y un menor.

El ataque fue perpetrado por un médico saudí de 50 años, residente en Alemania desde 2006, quien actuó sin cómplices y ahora se encuentra bajo custodia policial, según confirmaron las autoridades de Sajonia-Anhalt.

El primer ministro, Reiner Haseloff, detalló que además de las dos víctimas mortales, el incidente dejó más de 60 personas heridas. Un comunicado de la ciudad de Magdeburgo especificó que entre los heridos hay 15 en estado grave, 37 con heridas moderadas y 16 con lesiones menores, sumando un total de 68 afectados.

La respuesta de emergencia ha sido abrumadora, con alrededor de 100 bomberos y 50 socorristas trabajando en el área. Las víctimas están siendo atendidas en tiendas de campaña antes de ser trasladadas a hospitales cercanos.

El atacante, con residencia permanente en Alemania, fue detenido inmediatamente después de conducir un vehículo de alquiler con matrícula de Múnich aproximadamente 400 metros dentro del mercadillo alrededor de las 18:00 GMT. La ministra del Interior de Sajonia-Anhalt, Tamara Zieschang, confirmó que el hombre actuó solo y que vive en Bernburg, a unos 50 kilómetros de Magdeburgo.

El evento ha levantado interrogantes sobre la seguridad en estos mercadillos, especialmente tras el ataque similar en Berlín en 2016. El experto en terrorismo Hans-Jakob Schindler comentó en la cadena ZDF que este incidente refleja una falla en las medidas de seguridad implementadas. Además, resaltó que el perfil del agresor, tanto por su edad como nacionalidad, es atípico en comparación con otros ataques recientes.

Magdeburgo, como otras ciudades alemanas, había reforzado la seguridad con bolardos para evitar este tipo de incidentes, lo que hace aún más desconcertante cómo pudo ocurrir este ataque. La alcaldesa Simone Borris, visiblemente afectada, agradeció a los servicios de emergencia y anunció un servicio conmemorativo en la catedral de la ciudad para las víctimas.

El canciller Olaf Scholz, conmocionado por el evento, ha anunciado su visita a Magdeburgo este sábado para evaluar la situación y discutir medidas adicionales. En su cuenta de X, Scholz expresó su solidaridad con las víctimas y sus familias. Similarmente, el presidente Frank-Walter Steinmeier lamentó que las festividades navideñas hayan sido ensombrecidas por este trágico suceso, mientras que la ministra del Interior, Nancy Faeser, prometió una completa investigación sobre los antecedentes del ataque.

La comunidad de Magdeburgo y todo el país se enfrentan ahora a un periodo de duelo y reflexión sobre la seguridad pública en eventos festivos.