El Covid reduce la calidad del esperma a largo plazo
La infección por Sars-CoV-2 podría dañar la fertilidad masculina, incluso a largo plazo. Así se desprende de un estudio español presentado en el Congreso Anual de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología (Eshre), que se celebra en Copenhague (Dinamarca).
En concreto, el estudio evidencia que, después de al menos 100 días de haber dado negativo en la prueba de Covid 19 en varones, no hay mejoría en el número y movilidad de los espermatozoides, a pesar de que nuevos espermatozoides se han producido durante este tiempo.
LAS CIFRAS DEL ESTUDIO
Entre febrero de 2020 y octubre de 2022, los investigadores reclutaron a 45 hombres (con una edad media de 31 años) en seis clínicas de reproducción españolas. Todos tenían un diagnóstico confirmado de Covid leve. En los centros se habían recogido muestras de semen antes de la infección y después se tomó otra muestra entre 17 y 516 días después de haberla superado. La comparación mostró una diferencia estadísticamente significativa en el volumen espermático (-20%, de 2,5 a 2 mililitros), la concentración de espermatozoides (-26,5%, de 68 a 50 millones por ml), el recuento de espermatozoides (-37,5%, de 160 a 100 millones/ml), la motilidad total (-9,1%, de 49% a 45%) y la proporción de espermatozoides vivos (-5%, de 80% a 76%). Después del Covid, la mitad de los pacientes tenían un recuento medio de espermatozoides un 57% inferior al de antes de la infección. Y no sólo eso: cien días después de la infección (más de tres meses), la concentración y la movilidad no habían mejorado.
LA DURACIÓN DEL DAÑO
Así pues, el Covid, aunque se contraiga de forma leve, parece empeorar la calidad del esperma a largo plazo, aunque todavía queda por aclarar cualquier repercusión sobre la fertilidad. Partiendo de trabajos anteriores que mostraban cómo la calidad del esperma masculino parece deteriorarse a corto plazo tras la infección por Covid, Rocío Núñez-Calonge, asesora científica del Grupo Ur Internacional de la Unidad de Reproducción Científica de Madrid, quiso investigar la duración del daño.
«Teniendo en cuenta que se tardan unos 78 días en producir espermatozoides nuevos, nos pareció adecuado evaluar su calidad al menos tres meses después de la recuperación del Covid», explicó la experta. «Suponíamos que mejoraría, pero no ha sido así. No sabemos cuánto tiempo puede llevar recuperar la calidad del esperma anterior a la infección, y no puede excluirse un daño permanente incluso en hombres que han padecido una forma leve de Covid».
NIVELES HORMONALES
Núñez-Calonge señaló que el deterioro de la calidad del esperma podría no deberse a un efecto directo del Sars-CoV-2. «Es probable que otros factores, actualmente desconocidos, contribuyan al deterioro a largo plazo de estos parámetros», explicó.
«En este estudio no medimos los niveles hormonales: anteriormente se han notificado cambios intensos en la testosterona, un factor clave en la salud reproductiva masculina, en pacientes con infección por Covid». Para Núñez-Calonge, «es especialmente interesante que este descenso en la calidad del esperma se produzca en pacientes con infección leve, lo que significa que Sars-CoV-2 podría afectar a la fertilidad masculina incluso en ausencia de síntomas clínicos de la enfermedad».
El equipo de investigadores seguirá controlando a los pacientes a lo largo del tiempo, evaluando tanto la calidad del esperma como el estado hormonal. «La investigación demuestra la importancia del seguimiento a largo plazo de la fertilidad de los pacientes tras una infección por Covid, incluso leve», ha comentado el presidente de la Eshre, Carlos Calhaz-Jorge, del Centro Hospitalario del Norte de Lisboa y del Hospital de Santa María de Lisboa. «Sin embargo, es importante señalar que la calidad del esperma de estos pacientes tras la infección sigue estando dentro de los criterios normales definidos por la Organización Mundial de la Salud.
Por lo tanto, no está claro si esta reducción de la calidad del esperma se traduce en una reducción de la fertilidad. Esto debería ser objeto de nuevas investigaciones».
PROBLEMA IRREVERSIBLE
La Sociedad Italiana de Andrología ha alertado recientemente sobre el riesgo de que la pérdida de fertilidad masculina se convierta en un problema irreversible para la especie humana: en el peor de los casos, en 2070 los hombres ya no podrán tener hijos. Los principales problemas son el aumento de la edad de concepción y la abstinencia sexual como hábito creciente entre los jóvenes (se calcula que más de 1,6 millones de personas de 18 a 40 años sólo practican sexo virtual).
A estas razones se suman la contaminación y la exposición a sustancias tóxicas, una mezcla de condiciones que pueden afectar gravemente a la calidad y cantidad de espermatozoides. (elpaìs)