Tras el mortal ataque ruso ocurrido durante la noche del 25 de mayo, la embajadora de la UE en Ucrania, Katarina Mathernova, describió los ataques como una burla a los intentos diplomáticos de paz.

«Los rusos están aumentando la presión sin descanso. Intensificando el terror contra los civiles», escribió Mathernova en una publicación de Facebook . «Los ataques son más intensos y frecuentes. ¡Se ríen del mundo! Se burlan de Estados Unidos y de cualquier intento diplomático de paz. ¿Paz? ¿Qué paz?»

Rusia lanzó 69 misiles y 298 drones durante la noche del 25 de mayo, según la Fuerza Aérea de Ucrania. El ataque causó la muerte de 12 personas, entre ellas tres niños, y más de 60 heridos, según informó el ministro del Interior, Ihor Klymenko.

«¿Cómo reaccionará el mundo ante el terror y la clara provocación de Putin? ¿Ante su burla a cualquier negociación de alto el fuego? Debo admitir que me lo pregunto», escribió Mathernova. «Putin claramente persigue su objetivo declarado: matar ucranianos y someter a Ucrania. Lamentablemente, el único lenguaje que entiende es el de la fuerza».

El presidente Volodymyr Zelensky, en respuesta a los ataques, pidió sanciones más severas contra Rusia y agregó que el silencio de Estados Unidos y otros «alienta a Putin».

Representantes de Ucrania y Rusia se reunieron recientemente en Estambul el 16 de mayo para las primeras conversaciones directas entre ambos países en tres años. Si bien el equipo ucraniano había presionado por un alto el fuego incondicional, las conversaciones cesaron sin ningún avance aparente hacia este objetivo.

Rusia rechazó «categóricamente» la petición de Turquía, según el viceministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Sergiy Kyslytsia, que asistió a las conversaciones como miembro de la delegación ucraniana.

Tras concluir las conversaciones, el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, confirmó el 21 de mayo que Moscú no tenía interés en aceptar un alto el fuego en Ucrania y afirmó que Rusia «ya no quiere esto».

En respuesta a los ataques rusos del 24 y 25 de mayo, la Misión de Observación de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ucrania (HRMMU) publicó una declaración «deplorando» la nueva y mortal ola de ataques.

“Con al menos 78 personas muertas o heridas en todo el país, el ataque de anoche demuestra trágicamente el persistente riesgo mortal que supone para los civiles el uso de armas poderosas en zonas urbanas, incluidas aquellas alejadas de la línea del frente”, dijo Danielle Bell, jefa de HRMMU.

“Esto se suma al asombroso costo humano que esta guerra sigue infligiendo a los civiles, y cada vez más familias en todo el país lamentan sus pérdidas”.

Desde el comienzo de su invasión a gran escala, Rusia ha utilizado rutinariamente misiles y drones para atacar la infraestructura civil de Ucrania .