La expresidenta de las Islas Baleares y nueva diputada del PSOE, Francina Armengol, ha sido elegida este jueves como presidenta del Congreso de los Diputados en España con el apoyo de 178 diputados, superando así la mayoría absoluta necesaria en primera vuelta gracias a los votos de Junts per Catalunya y del resto de socios parlamentarios de Pedro Sánchez.

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«Queda en consecuencia proclamada como presidenta del Congreso doña Francina Armengol», anunció Cristina Narbona, la diputada de más edad de la Cámara Baja, que preside tradicionalmente la primera sesión de la nueva legislatura.

La elección de la candidata del Partido Socialista, un éxito para Sánchez, le augura posibilidades de renovar su mandato como presidente del Gobierno tras el ajustado resultado de las elecciones del pasado 23 de julio.

Armengol, de 52 años, obtuvo dos votos por encima de la mayoría absoluta gracias al apoyo de los siete diputados de la formación que lidera el ala dura del nacionalismo catalán, la dirigida por Carles Puigdemont. La propia candidatura de Armengol fue considerada un guiño de Sánchez a los independentistas catalanes, ya que es la expresidenta de Baleares, región culturalmente próxima a Cataluña, y es catalanoparlante.

Puigdemont sumó su apoyo al ya anunciado por ERC, cuyo portavoz, Gabriel Rufián, aclaró que éste no garantiza su apoyo a la investidura de Sánchez. «Eso es otro proceso, otra negociación, otro acuerdo», puntualizó.

La izquierda republicana catalana avanzó que apoyaría el nombramiento de Armengol a cambio de un acuerdo por el que se permitirá el uso de las lenguas cooficiales en las sesiones de la Cámara Baja.

La secretaria general de Podemos, Ione Belarra, se ha mostrado convencida de que «si hay valentía y firmeza» será posible revalidar una mayoría plurinacional y democrática, y con ella un Gobierno de coalición.

Una Mesa del Congreso progresista nos situaría «un paso más cerca de una posible investidura», añadió. Dicha investudura de Sánchez, sin embargo, sigue dependiendo del apoyo de los nacionalistas catalanes.

Los diputados de Vox, por su parte, votaron a su propio candidato después de que esta mañana el PP confirmara que no ayudaría al partido de Santiago Abascal a conseguir un puesto en la Mesa del Congreso.

Vox criticó que sea la segunda vez en democracia que la tercera fuerza parlamentaria no está representada en la Mesa.

El Senado será presidido por el senador popular Pedro Rollán, elegido en primera votación al tener los populares mayoría absoluta.

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Rollán, que fue el senador más votado en las elecciones generales, ha obtenido 142 votos a favor mientras que 114 senadores han votado en blanco, entre ellos los 88 del PSOE. (dw)

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