Estados Unidos da por hecho que Israel está preparando una operación militar «inminente» en el sur del Líbano, la cual se prevé que sea «limitada», según informaron fuentes israelíes y estadounidenses al diario The Washington Post. La incursión forma parte de los esfuerzos de Israel para desmantelar la infraestructura de lanzaderas de cohetes y arsenales del grupo chií Hizbulá, los cuales representan un riesgo para las comunidades del norte del país.

Los funcionarios indicaron que las discusiones entre ambos gobiernos durante el fin de semana llevaron a Israel a reducir significativamente el alcance de la operación, enfocándose en objetivos estratégicos para neutralizar las amenazas de Hizbulá y retirarse posteriormente. “Los planes están en línea con los americanos. El entendimiento es que no vamos a tener otro Gaza”, afirmó una fuente israelí.

Por su parte, el presidente estadounidense, Joe Biden, al ser consultado sobre estos planes, expresó: “Estoy cómodo con que ellos paren. Necesitamos un alto el fuego ya”.

Mientras tanto, Israel ha desplegado pequeñas unidades de fuerzas especiales en el sur del Líbano, que estarían llevando a cabo misiones para mapear y desmantelar la red de túneles de Hizbulá en la zona fronteriza, según The Wall Street Journal. Estas acciones buscan preparar el terreno para evitar que las defensas de la milicia chií puedan causar grandes bajas a las tropas israelíes en caso de una incursión a mayor escala.

La escalada en el conflicto entre Israel y Hizbulá se intensificó desde el pasado viernes, tras la muerte del líder del grupo libanés, Hasán Nasrala, durante un bombardeo israelí. La situación ha elevado las preocupaciones de una confrontación directa en la región, con implicaciones potencialmente desestabilizadoras para el Líbano e Israel.