
Nace el «Grupo de La Haya»: Nueve países lo integran incluyendo Honduras
Este viernes, representantes de Bolivia, Colombia, Cuba, Honduras y otros cinco países formaron el «Grupo de La Haya», una iniciativa destinada a reafirmar los principios de la justicia internacional y defender la autoridad de tribunales como la Corte Penal Internacional (CPI) y la Corte Internacional de Justicia (CIJ). La creación de este grupo surge en un contexto de crecientes desafíos hacia la legitimidad y el funcionamiento de estas instituciones.
El grupo, integrado además por Belice, Malasia, Namibia, Senegal y Sudáfrica, se reunió en La Haya, Países Bajos, para acordar un programa de acción que fortalezca las instituciones de gobernanza global. En una declaración conjunta, los países afirmaron estar «guiados por los objetivos y principios de la Carta de las Naciones Unidas».
Defensa de los tribunales internacionales
Alvin Botes, ministro adjunto de Relaciones Internacionales de Sudáfrica, explicó que los tribunales internacionales con sede en La Haya han sido objeto de ataques «por el hecho de que estas instituciones se atrevieron a pedir cuentas a Israel». Sudáfrica, uno de los miembros fundadores del grupo, acudió a la CIJ en diciembre de 2023 para denunciar que la guerra de Israel contra el movimiento islamista palestino Hamás en Gaza violaba la Convención de la ONU de 1948 sobre el genocidio, una acusación que Israel ha rechazado.
El Grupo de La Haya también instó a los Estados partes a «cumplir con sus obligaciones en virtud del Estatuto de Roma», en referencia a las órdenes de arresto emitidas por la CPI en noviembre de 2023 contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y su exministro de Defensa, Yoav Gallant, acusados de crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.
Desafíos y críticas a la justicia internacional
La presidenta de la CPI, Karim Khan, criticó en diciembre los ataques contra el tribunal, incluyendo «amenazas, presiones y actos de sabotaje», luego de que se emitieran órdenes de arresto relacionadas con los conflictos en Gaza y Ucrania. A pesar de su importancia, ni la CIJ, el órgano judicial más alto de la ONU, ni la CPI, que depende de los Estados miembros, tienen la capacidad de hacer cumplir sus decisiones, lo que ha generado cuestionamientos sobre su eficacia.
El Grupo de La Haya busca contrarrestar estas críticas y fortalecer el papel de los tribunales internacionales en la promoción de la justicia y la rendición de cuentas. «Este grupo de países en desarrollo se reunió para acordar un programa de acción destinado a defender las instituciones de gobernanza mundial», declaró Botes.
Un llamado a la cooperación internacional
La creación del Grupo de La Haya representa un esfuerzo conjunto de países en desarrollo para defender el multilateralismo y la justicia internacional en un momento en que estas instituciones enfrentan desafíos sin precedentes. Los miembros del grupo han expresado su compromiso con los principios de la Carta de las Naciones Unidas y su determinación para garantizar que los crímenes internacionales no queden impunes.
Este movimiento también refleja la creciente preocupación por la polarización en el escenario global y la necesidad de fortalecer los mecanismos de justicia internacional para abordar conflictos y violaciones de derechos humanos en todo el mundo. Con su formación, el Grupo de La Haya se posiciona como un actor clave en la defensa de un orden internacional basado en el derecho y la cooperación.