Putin se apresta para declarar la guerra a Ucrania
Rusia ultima los preparativos del Día de la Victoria, con el que conmemora cada 9 de mayo la victoria soviética sobre la Alemania nazi. En esta ocasión, los actos vienen precedidos de una ofensiva militar en Ucrania y de las especulaciones en torno a posibles cambios en dicho conflicto coincidiendo con la simbólica fecha.
El principal acto del Día de la Victoria tiene lugar en la Plaza Roja de Moscú, escenario de un desfile militar en presencia del presidente ruso, Vladimir Putin, y de los principales cargos políticos y militares.
Ucrania asegura que han muerto más de 20.000 uniformados rusos y la Inteligencia británica, que elabora sus propios informes, estima que serían al menos 15.000. Datos aparte, lo que parece ya confirmado a estas alturas es que sobre el terreno las cosas no han ido como a Putin le hubiese gustado cuando anunció el inicio de la «operación especial».
Cambios de fondo
Para Putin, la guerra de Ucrania no es tal. Tanto él como la cúpula rusa se ciñen al término ‘operación especial’ para referirse a la ofensiva e incluso han castigado a medios y activistas que aludan a términos como guerra o invasión, en una escalada represiva que se ha traducido en una única línea de discurso mediática.
Sin embargo, en círculos políticos occidentales se prevé que el presidente de Rusia pueda utilizar el Día de la Victoria para declarar oficialmente la guerra, según fuentes consultadas por la cadena estadounidense CNN. En la práctica, facilitaría la movilización de más tropas y reservistas, después de que Moscú haya recurrido incluso a mercenarios extranjeros para contrarrestar la resistencia ucraniana.
El ministro de Defensa británico, Ben Wallace, también apuntó en una entrevista a la emisora LBC Radio que Putin pasará página de la «operación especial» para hablar abiertamente de guerra. La premisa sería clara: «Estamos en guerra contra los nazis y necesito más gente», declaró Wallace.
La «desnazificación» de Ucrania ha figurado de forma recurrente entre las justificaciones rusas de la invasión, a pesar de que los objetivos han ido variando después de que las fuerzas rusas no lograsen avanzar en zonas urbanas clave como Kiev. Las operaciones se concentran ahora en «liberar» el Donbás, aunque para ello también se siguen llevando a cabo ofensivas en toda las zonas del este y el sur.
Moscú ha evitado especular sobre el potencial cambio de la terminología, pero sí ha salido al paso de las dudas sobre una resolución apresurada del conflicto.
Hitos de la victoria
A los rumores se ha sumado este martes el Papa Francisco, quien ha desvelado en una entrevista a ‘Il Corriere della Sera’ que el primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, le contó el pasado 21 de abril durante su reunión en el Vaticano que «los rusos tienen un plan, que todo acabará el 9 de mayo».
El portavoz del Departamento de Estado estadounidense, Ned Price, cree que hay «buenas razones» para creer que «los rusos utilizarán todo lo que puedan» para hacer del 9 de mayo una jornada también propicia para la propaganda en relación a Ucrania, por lo que en Washington no descartan anuncios.
Entre posibles hitos que figuran sobre la mesa estarían la anexión de las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk, cuya independencia Moscú ya reconoció apenas unos días antes de la invasión, una declaración sobre la captura total de la ciudad de Mariúpol o la apertura clara de nuevos frentes de batalla en otros puntos de Ucrania como Odesa.(20minutos.es)