Un devastador terremoto de magnitud 7,3 azotó este martes la capital de Vanuatu, Port Vila, causando severos daños y cortes en la comunicación.

El evento, registrado a las 12:47 hora local (01:47 GMT), tuvo su epicentro a 30 kilómetros al oeste de la ciudad y a una profundidad de 57,1 kilómetros bajo el lecho marino, según el Servicio Geológico de Estados Unidos. El Centro Sismológico Euromediterráneo (EMSC) elevó posteriormente la magnitud a 7,4.

Equipos de rescate están trabajando entre los escombros en busca de posibles víctimas mortales, mientras los servicios de emergencia atienden a decenas de heridos.

La cadena de televisión VBTC ha mostrado imágenes de la crisis, con carreteras bloqueadas por deslizamientos de tierra, vehículos y edificios destrozados, y la afluencia masiva de personas hacia los hospitales.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha desplegado un equipo de emergencia para asistir al Hospital Vila Central y al Ministerio de Salud. A pesar de estos esfuerzos, el número exacto de víctimas aún no se ha confirmado oficialmente.

Sin embargo, Katie Greenwood de la Cruz Roja Internacional informó en X de al menos 6 fallecidos y múltiples heridos, aunque las comunicaciones siguen siendo un desafío debido a las interrupciones en los servicios.

El periodista Dan McGarry confirmó la muerte de una persona y la gravedad de varios heridos. Además, se han sentido varias réplicas, con magnitudes de 5,5 y 5,4, aumentando la preocupación por la estabilidad de la infraestructura ya dañada.

Las embajadas de EE.UU., Nueva Zelanda, Francia y Reino Unido reportaron daños significativos en sus instalaciones en Port Vila, con la Embajada de EE.UU. declarando su cierre temporal. La ONG CARE también ha reportado daños severos en su oficina local, señalando además cortes de electricidad y agua en gran parte de la ciudad.

La conectividad a internet ha sufrido una caída casi total según NetBlocks, aunque Vodafone ha restablecido parcialmente los servicios de llamadas internacionales. Las aerolíneas Jetstar y Qantas han cancelado vuelos a Port Vila debido a los daños reportados en el aeropuerto.

Tras el terremoto, se activó una alerta de tsunami que luego fue levantada. Vanuatu, situado en el Anillo de Fuego del Pacífico, es conocido por su alta actividad sísmica, lo que explica la frecuencia de estos eventos en la región