Trump y Xi alcanzan acuerdo clave sobre tierras raras, aranceles y fentanilo
Busan, Corea del Sur – 30 de octubre de 2025. En un giro significativo para la economía global, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo chino, Xi Jinping, anunciaron este jueves un acuerdo bilateral que reduce los aranceles a las importaciones chinas y suspende temporalmente las restricciones a la exportación de tierras raras, además de incluir compromisos en la lucha contra el tráfico de fentanilo.
Durante una reunión de casi dos horas en el marco de la cumbre de APEC en Busan, ambos líderes acordaron reducir los aranceles estadounidenses del 57% al 47% sobre productos chinos, incluyendo una rebaja específica del 20% al 10% en los gravámenes vinculados al comercio de precursores químicos del fentanilo.
Trump calificó el encuentro como “un gran éxito” y aseguró que el pacto representa “una solución para el mundo entero” en cuanto al suministro de minerales estratégicos.
Por su parte, Xi Jinping accedió a suspender durante un año las restricciones impuestas el pasado 9 de octubre a la exportación de tierras raras, minerales esenciales para industrias como la tecnológica, aeroespacial y de defensa.
China, que domina el procesamiento global de estos recursos, se comprometió a mantener el flujo de exportaciones y a comprar grandes cantidades de soja estadounidense como parte del acuerdo.
Además, ambos mandatarios abordaron la crisis del fentanilo, un opioide sintético que ha generado una emergencia sanitaria en Estados Unidos.
Trump afirmó que China “trabajará arduamente para detener el flujo” de esta sustancia, en respuesta a las acusaciones de Washington sobre el papel de Pekín en su producción y distribución.
El acuerdo, que estará vigente por al menos un año y podría ser prorrogado, marca el primer encuentro cara a cara entre Trump y Xi desde 2019.
Ambos líderes anunciaron futuras visitas recíprocas: Trump viajará a China en abril, mientras que Xi será recibido en Estados Unidos posteriormente.
Este pacto no solo busca aliviar las tensiones comerciales entre las dos mayores economías del mundo, sino también estabilizar los mercados internacionales y garantizar el acceso a recursos clave para la innovación tecnológica y la seguridad nacional.
