Representantes sindicales de la zona de Coyoles, en Olanchito, Yoro, han informado que dos fincas bananeras, Limones A y Limones B, cerrarán operaciones en los próximos días. Esta decisión pone en riesgo la estabilidad laboral de más de 500 personas que trabajan en estas fincas.

Los trabajadores fueron convocados por la Standard Fruit Company, empresa propietaria de las fincas, para notificarles el cierre. Aunque se les ha propuesto reubicaciones, salarios y prestaciones para aquellos que decidan irse, la incertidumbre sobre el futuro laboral de muchos es evidente.

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Estos cierres se dan en un contexto en el que las fincas bananeras han sido objeto de ocupaciones por parte de grupos campesinos. En 2023, la Policía Nacional desalojó a grupos campesinos que habían invadido unas 2,450 hectáreas de fincas bananeras en Sabá, Colón, una de las zonas más afectadas por este fenómeno.

Además, en octubre del mismo año, grupos de supuestos campesinos ocuparon fincas en La Paz y La Esperanza, llegando a realizar la labor de recolección de la fruta.

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La situación de las fincas bananeras en la región de Olanchito, Yoro, refleja la complejidad de las dinámicas laborales y sociales en el sector agrícola, así como los desafíos que enfrentan tanto los trabajadores como los propietarios de las fincas en un contexto de tensiones y cambios en el entorno rural.