Tegucigalpa, Honduras. En respuesta a denuncias sobre impresiones masivas de papeletas electorales previamente marcadas, la consejera del Consejo Nacional Electoral (CNE), Cossette López, solicitó la implementación de medidas adicionales para garantizar la autenticidad y trazabilidad de las actas de cierre.

La propuesta cuenta con el respaldo de la presidenta del CNE, Ana Paola Hall, quien ha reiterado su compromiso con un proceso electoral independiente y transparente.

Según el oficio enviado por López, el diseño actual de las actas presenta vulnerabilidades, especialmente en los códigos QR y de barra, que se basan en información genérica fácilmente accesible. También se cuestiona la fragilidad del patrón de seguridad, construido a partir de logos institucionales disponibles en línea.

La propuesta incluye:

• Impresión de datos específicos de cada Junta Receptora de Votos (JRV) en tinta reactiva roja/UVE.
• Inclusión del número de serie de la impresora utilizada.
• Incorporación de un microcódigo alfanumérico único de siete dígitos por acta, ilegible al ojo humano.
• Acceso cifrado a la base de datos, habilitado únicamente mediante contraseña conjunta de los tres consejeros propietarios.

Estas medidas buscan asegurar que cada acta que regrese al CNE sea exactamente la misma que salió de sus bodegas, fortaleciendo la cadena de custodia y la confianza ciudadana en el proceso.

Además, López anunció que el domingo 9 de noviembre se realizará un simulacro de transmisión de resultados, con el objetivo de validar todos los componentes tecnológicos y logísticos del sistema electoral. El ejercicio permitirá identificar y corregir fallos antes de las elecciones generales del 30 de noviembre.