El gobierno de Estados Unidos, a través de una determinación oficial remitida al Congreso por el presidente Donald Trump, ha incluido a Honduras en la lista de 22 países considerados como principales naciones de tránsito o producción ilícita de drogas.

La medida forma parte de la estrategia global estadounidense para combatir el narcotráfico y sus redes transnacionales.

La lista publicada por la Casa Blanca abarca a varios países latinoamericanos, entre ellos México, Colombia, Venezuela, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Panamá y Perú, así como naciones de Asia y el Caribe. Honduras figura en este grupo debido a su ubicación geográfica estratégica y las rutas comerciales que, según el informe, facilitan el paso de estupefacientes hacia mercados internacionales.

El documento aclara que la inclusión no implica necesariamente una falta de cooperación por parte de los gobiernos señalados, sino que responde a factores estructurales que favorecen el tránsito o producción de drogas, incluso en países que aplican medidas de control rigurosas.

Designaciones más severas y advertencias

Además de la lista general, Estados Unidos identificó a cinco países —Afganistán, Bolivia, Birmania, Colombia y Venezuela— como naciones que “han fracasado de manera demostrable” en sus compromisos internacionales de lucha antidrogas. En el caso de Colombia, se señala un aumento récord en cultivos de coca y producción de cocaína, mientras que Venezuela es acusada de liderar una de las mayores redes de narcotráfico de cocaína en el mundo.

La determinación presidencial también destaca la crisis del fentanilo en Estados Unidos, con un promedio de 200 muertes diarias por sobredosis en 2024. El mandatario defendió medidas como el reforzamiento de la frontera con México, sanciones a China por la exportación de precursores químicos, y una mayor cooperación con Canadá.

La Casa Blanca advirtió que continuará utilizando herramientas diplomáticas, económicas y militares para frenar el narcotráfico, instando a los países incluidos en la lista —como Honduras— a redoblar sus esfuerzos o enfrentar “serias consecuencias”.

La inclusión de Honduras en esta lista podría generar reacciones en el ámbito político y diplomático, así como presionar a las autoridades nacionales a fortalecer sus estrategias de combate al narcotráfico. En años recientes, el país ha sido señalado como corredor clave en el tráfico de cocaína hacia Norteamérica, lo que ha motivado reformas legales, cooperación internacional y operativos conjuntos.