El doctor Mario Noé Villafranca lanzó hoy su candidatura presidencial por el movimiento Todos Somos Honduras (TSH) tras leer una carta pública con el título Si Aceptó la que se comparte a continuación:

Carta a Honduras:

SÍ ACEPTO

Con satisfacción, como buen cristiano, católico y hombre de familia, respetuoso de todas las denominaciones que creen en Dios y afortunado de poder sustentar con mi frente en alto el honor de tener una hoja intachable de vida y servicio a mi Patria, hoy comparezco ante esta tribuna cívica de gente que ama a Honduras, a responder la invitación del Partido Todos Somos Honduras (TSH) para ir al frente de un proyecto de País, en el momento más difícil que le ha tocado vivir a mi Nación. La presidencia de la república es el más alto honor cívico al que un hondureño puede aspirar. Fiel a mis principios y valores, pongo este, como todos mis proyectos de vida, en las sagradas manos del Creador Divino del Universo, nuestro Dios.

Hoy, delante del pueblo todo de Honduras, ante Dios y mi esposa Katia, nuestras hijas Camila y Valentina y con claridad de conciencia le digo al Partido Todos Somos Honduras (TSH) y a su militancia: SÍ ACEPTO.

ACEPTO, comenzar una lucha autentica por el rescate y defensa de la democracia y la independencia absoluta de los poderes del estado hondureño.

ACEPTO, integrar planillas con los mejores hombres y mujeres del país, para que vayan a un Congreso Nacional en libertad y sin ataduras, quienes junto a los que el pueblo elija, puedan seleccionar libremente al hondureño que presidirá el Poder Legislativo y sus acompañantes en la junta directiva, llevando consigo las más sanas iniciativas para enaltecer la hondureñidad con propuestas de modernidad como un sistema bicameral, una reducción sensata del número de diputados, elecciones para alcaldes, diputados y presidente por separado y todo lo que desinteresadamente sea para bien de la colectividad hondureña y no para favorecer intereses individuales o de grupos privilegiados.

ACEPTO, porque creo en un Poder Judicial independiente, impartiendo justicia sin influencias políticas ni injerencias desde otro poder del estado, buscando siempre el respeto a la carrera judicial independiente como elemento vital para sacar adelante los compromisos de la justicia con los hondureños.

ACEPTO, porque como titular del ejecutivo me someteré a cualquier procedimiento emanado desde la Fiscalía General de la República, de la que siempre esperaré independencia y libertad de acción, pero también pasos hacia la modernización con fiscalías departamentales y municipales totalmente independientes.

ACEPTO, porque el reto es grande en un momento trascendental en el que los tres partidos mayoritarios e históricos de mi país han sido evidenciados en una terrible telaraña de corrupción y actos ilícitos, que les quita toda autoridad moral para postularle a la Patria una propuesta de gobierno creíble y respaldada por la hondureñidad, más allá del impacto negativo que esta triste realidad acarrea para nuestra amada Honduras en el concierto de las naciones del planeta.

ACEPTO, porque creo en una juventud hondureña sana, estudiosa, vigorosa y optimista. Que busque la dicha de vivir en el país que como generación vigente le vamos a entregar y que honre en toda su dimensión el esfuerzo de los que lucharon para entregarnos una Nación democrática que busca las luces que iluminen el sendero del progreso y del desarrollo sostenible.

ACEPTO, luchar con toda mi capacidad y experiencia profesional para que en la Salud Pública los hondureños encontremos la solución y no el problema…y esto pasa, entre otras cosas, por la adecuada distribución del presupuesto y el manejo limpio y auditado de los recursos, emulando además los caminos transitados por países amigos como Canadá hace 50 años y Costa Rica poco tiempo después, quienes dieron pasos agigantados hacia una Seguridad Social universal, accesible para toda la población, de la cual derive una pensión digna que impacte positivamente tanto a los trabajadores del sector público como privado. Lo digo con pleno conocimiento de causa, si no garantizamos al acceso permanente al agua a todos nuestros compatriotas, la salud seguirá siendo un sueño inalcanzable. Hay algo más contundente que debo dejar muy claro, el mayor porcentaje de nuestra inversión en Salud Pública, deberá obligatoriamente destinarse a la Atención Primaria en los servicios de salud, ese punto no está sujeto a cambio.

ACEPTO, ser un convencido del papel de la educación en valores en la transformación de una sociedad, a la que la clase política dominante ha rezagado para tenerla a su servicio. Para ello, necesitamos un sistema educativo capaz de producir hondureños que una vez egresados del mismo sean aptos para competir técnica y académicamente con profesionales del resto del mundo. Como medida paliativa creo en un programa de becas justo, que reconozca la excelencia académica, las limitaciones socioeconómicas y las destrezas de los deportistas por encima de los favores políticos y el compadrazgo. Mi lucha para frenar la fuga de cerebros será titánica.

ACEPTO, ser un deportista nato y un entrañable promotor de los deportes, reconociendo que si bien el fútbol, nuestra liga y nuestras selecciones son la pasión de los hondureños, debemos apoyar a todas las disciplinas deportivas por igual, conscientes de que nos embarga una enorme felicidad cada vez que un atleta hondureño llega a un podio Centroamericano, Centroamericano y del Caribe, Panamericano y no niego que me emocionaría in extremis con una medalla olímpica que nunca hemos logrado, pero que vamos a trabajar para luchar limpiamente por ella. Igual satisfacción nos produce como hondureños cuando vemos a un compatriota brillar en el rendimiento deportivo al más alto nivel en cualquier lugar del mundo en eventos individuales o colectivos.

ACEPTO, que, con finanzas sólidas y manejadas con decencia por hombres y mujeres con temor a Dios, podremos desarrollar la infraestructura necesaria en todos los campos que el pueblo demanda para progresar.

ACEPTO, que en el campo de la seguridad debemos buscar a los estrategas capaces en materia de combate al ilícito y establecer políticas de país efectivas, pero más importante será un enfoque preventivo del crimen y del delito, principalmente de ese azote que atormenta a nuestra sociedad, los femicidios.

ACEPTO, la importancia de la defensa del territorio nacional, nuestros mares, fronteras y el espacio aéreo, por ello creo en unas Fuerzas Armadas profesionales y sólidas, preparadas para defendernos de potenciales agresores, pero que en tiempos de paz sean solidarias con su pueblo, participando activamente de los procesos de desarrollo nacional.

ACEPTO, el papel de la productividad agrícola, ganadera y forestal como generadores de desarrollo, pero con una visión ecológica que se adapte a las voces sensatas del mundo que luchan por preservar nuestro planeta. Creo en la reconversión del banco destinado para promover todas las actividades productivas del campo, pero con decencia y auditorías continuas que garanticen la transparencia en el manejo de los fondos. Respaldaré la creación de universidades para los hijos de las familias del campo, con carreras vinculadas a la productividad, principalmente en la tecnificación de las cosechas, el riego y todo lo que represente su desarrollo.

ACEPTO, que postularé a los profesionales, hombres y mujeres, más competentes para modernizar los servicios públicos de todos mis compatriotas, asegurándome que los mismos sean manejados por el mejor calificado, sin importar su afinidad política, pero con la certeza de que su único compromiso sea con Dios y con su pueblo.

ACEPTO, que somos un país expuesto a eventos catastróficos de origen natural, para lo cual, la instancia permanente destinada a la prevención y atención de estos desastres deberá ser eminentemente técnica, con carácter permanente y nunca política sujeta a cambios circunstanciales.

ACEPTO, que la Patria requiere de un servicio consular altamente capacitado y sensible a las necesidades de nuestros compatriotas en cualquier lugar en el que se encuentren, pero también reconozco que nuestras relaciones exteriores deben corresponder solidariamente a nuestros aliados históricos, debiendo siempre enfrentar en bloque las amenazas que nos agobien, respetando y solicitando respeto a nuestra autodeterminación y fortaleciendo la cooperación internacional mutua tanto en necesidades de carácter social como en seguridad y defensa de nuestro territorio.

ACEPTO, el papel de garante espiritual colectivo de la Iglesia, por lo que creo en el respeto irrestricto a la libertad de culto y en la consecuente función de centinela de la vida en valores del pueblo creyente de Honduras, principalmente en aquellos valores que predican el modelo de vida y conducta que las Sagradas Escrituras promueven, como un modelo inequívoco de coexistencia armónica entre hermanos hondureños.

ACEPTO, ser un fiel creyente de la clase media como sustento de la sociedad, visualizo en grande la función gubernamental de proteger y empoderar a este importante estrato de nuestra sociedad, tratando de expandirla, como indicador de desarrollo colectivo del país.

ACEPTO, creer firmemente en el respeto a los derechos de los trabajadores, cuyas experiencias de vida devenimos en la obligación de escuchar, para dar participación activa al sector obrero en la toma de decisiones y basados en esas experiencias, construir un mejor futuro para nuestra fuerza laboral.

ACEPTO, que el sector privado debe ser siempre nuestro aliado estratégico y nunca ser visto como un enemigo del gobierno. En tal sentido, el dialogo tripartito será siempre el canal para resolver conflictos y el apoyo a la empresa privada, deberá ser la llave que masifique la inversión y genere más y mejores fuentes de trabajo.

ACEPTO, que, si el pueblo hondureño me honra con el altísimo honor de convertirme en su primer servidor, habrá cuatro postulados que me acompañaran a lo largo del periodo para el cual seré constitucionalmente electo:

1. No robaré
2. No mentiré
3. Buscaré la paz de Honduras, y
4. Generaré un futuro de progreso.

ACEPTO, que, si soy honrado con el alto honor de estar al frente del ejecutivo, mi primera meta medible será frenar la migración masiva causada por las malas decisiones de los políticos tradicionales en Honduras.

ACEPTO, que como conclusión a todo lo planteado, mi compromiso de honrar a Dios, a la Patria y a mi familia, pasa por preparar a mi amada Honduras para enfrentar los retos de la etapa medular del siglo XXI con modernismo y sin corrupción, buscando a toda costa para mis compatriotas, lo mismo que deseo para mis hijas, un futuro prometedor, en paz, lleno de fuentes de trabajo y con oportunidades de desarrollarse en la tierra que les vio nacer.

Finalmente, ACEPTO la candidatura a la presidencia de la republica de Honduras  por el Partido Todos Somos Honduras (TSH), bajo el compromiso de luchar incansablemente por llevar estas buenas nuevas a la hondureñidad entera, trabajando para ello en la estructuración local, departamental y nacional de los cuadros políticos necesarios para lograrlo, fundamentados en el voluntariado, con gente nueva que tema a Dios, que ame a su Patria y sostenga la cabeza con la frente en alto ante su familia sin avergonzarse de lo actuado, que venga con ideas nuevas, a los que no les interese robar sino servir a su pueblo y en quienes brote el espíritu de la dicha de ser un verdadero catracho.

Que Dios bendiga a Honduras.

Muy respetuosamente,

Dr. Mario Noé Villafranca

Candidato a la Presidencia de Honduras

Partido Todos Somos Honduras (TSH)