Rodeado por las olas color aguamarina de la segunda barrera de coral más grande del mundo, Roatán, ubicado frente a la costa de Honduras, ha atraído a mochileros y amantes de la naturaleza durante décadas, pero nuevas propiedades de lujo están transformando el atractivo rústico de la isla.

Este verano, Kimpton Grand Roatan Resort & Spa presentará un resort de cinco estrellas, completo con un bar y piscina en la azotea, y un spa que ofrece tratamientos arraigados en las tradiciones indígenas, con vista a West Bay Beach.

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En otra parte de la isla, Azul, un nuevo restaurante gourmet en el Blue Roatan Resort dirigido por el chef local Ramón Orozco, es responsable de algunas de las mejores comidas aquí.

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El carpaccio de caracol y la langosta con coco y queso manchego se sirven en un exuberante jardín al aire libre donde es probable que vea guacamayos volando entre los árboles.

En el extremo noreste de Roatán, el tranquilo pueblo de Punta Gorda ostenta el título de asentamiento permanente más antiguo de la isla. Establecida por los afroindígenas garífunas en el siglo XVIII, la ciudad exhibe danza, música y comida garífunas en fiestas callejeras semanales.

A unas 20 millas de la costa de Roatán, el archipiélago de Cayos Cochinos, una reserva marina y Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, también está listo para lanzar nuevas cabañas ecológicas de lujo esta primavera.

Tome un ferry de 45 minutos desde Roatán y aterrizará en el paraíso aislado de Cayos Cochinos. Rebosante de belleza surrealista, la isla cuenta con 800 acres de tierra protegida y 110 especies de coral en sus aguas cristalinas. Las playas de arena perlada albergan tortugas carey y la boa rosada de Cochino Cays. (TIME)