Una tragedia estremeció a la comunidad hondureña en Estados Unidos el pasado sábado 8 de noviembre, cuando tres compatriotas fueron asesinados en un tiroteo ocurrido en una empresa de jardinería ubicada en la calle Stahl, al norte de San Antonio, Texas.

El agresor era conocido por las víctimas

El responsable del ataque fue identificado como José Hernández Galo, de 21 años, también originario de Honduras, quien abrió fuego contra sus compañeros de trabajo antes de quitarse la vida con un disparo. Las víctimas fueron Selvin Chacón (48 años), Sergio Chacón (38) —hermanos originarios de Santa Bárbara— y Karen Paola Bautista (24), madre de un niño de tres años.

Según el reporte del Departamento de Policía de San Antonio (SAPD), el tiroteo ocurrió alrededor de las 8:00 a.m., cuando otros empleados escucharon las detonaciones y lograron huir para alertar a las autoridades. Al llegar al lugar, los agentes encontraron a los tres hondureños sin signos vitales y al agresor fallecido por herida autoinfligida.

Confianza traicionada y duelo comunitario

De acuerdo con testimonios familiares, los hermanos Chacón habían acogido a Hernández Galo en su vivienda, brindándole techo, comida y empleo en la empresa de jardinería. “Dormía a la par nuestra. Le dimos confianza y nos pagó con esto”, lamentó un cuñado de las víctimas.

Karen Bautista, quien residía en San Antonio desde hace dos años, deja huérfano a su hijo Yoav Isaí. Su familia ha iniciado una campaña de recaudación de fondos para cubrir los gastos funerarios y la repatriación del cuerpo a Honduras.

Investigación en curso y llamado a las autoridades hondureñas

Las autoridades locales continúan investigando el motivo del ataque, revisando cámaras de seguridad y recolectando evidencia en el lugar. Aunque no se ha confirmado un móvil, se presume que podrían haber existido conflictos personales o laborales previos entre el agresor y las víctimas.

El Consulado de Honduras en Texas ya fue notificado y está brindando asistencia consular a los familiares, quienes solicitan apoyo urgente del gobierno hondureño para la repatriación de los cuerpos. La comunidad hondureña en el exterior ha expresado su consternación y ha pedido públicamente a la Presidenta Xiomara Castro y a la Cancillería que actúen con celeridad.

Dolor compartido y solidaridad internacional

La tragedia ha generado una ola de solidaridad entre migrantes hondureños en Estados Unidos, quienes han organizado vigilias, colectas y mensajes de apoyo a las familias afectadas. Organizaciones como Casa Honduras y líderes comunitarios han instado a reforzar los mecanismos de protección y atención consular para los hondureños en el exterior.

Este hecho pone de relieve la vulnerabilidad de los migrantes en entornos laborales informales y la necesidad de fortalecer redes de apoyo, prevención de violencia y salud mental en comunidades migrantes.