Santa Rosa de Copán, Honduras — Lo que debía ser una jornada de aprendizaje y entusiasmo terminó en tragedia el miércoles 22 de octubre, cuando Marlon Josué Ávila García, estudiante de 17 años, perdió la vida tras recibir una descarga eléctrica durante la III Feria de la Ciencia organizada por el Instituto Técnico Santo Domingo Savio.

Según el vocero de la Policía Nacional en la zona occidental, Gerson Ramos, el joven manipulaba cables de 110 y 220 voltios como parte de un proyecto escolar cuando ocurrió el accidente. “Uno de los jóvenes recibió una descarga eléctrica luego de estar manipulando con unas pinzas un proyecto que conllevaba una línea 110 y 220. Se recibió una llamada de Salud y se constató su muerte”, explicó Ramos 1.

El portavoz añadió que el deceso fue considerado accidental, aunque se investiga si hubo supervisión adecuada o si los estudiantes estaban realizando maniobras no autorizadas. “Hay posibles hipótesis y el trabajo requiere tiempo para obtener más información”, señaló.

El Instituto Técnico Santo Domingo Savio emitió un comunicado expresando su profundo pesar por el fallecimiento de Ávila García. Según la institución, el joven “se encontraba observando las presentaciones de los proyectos científicos cuando, por iniciativa propia, decidió manipular uno de los experimentos exhibidos”, lo que derivó en el accidente, pese a la atención inmediata brindada por el personal docente y administrativo 1.

El centro educativo aseguró que la feria se desarrolló bajo normas de seguridad y con supervisión constante de los docentes responsables. Además, reafirmó su compromiso con el bienestar de la comunidad estudiantil y ofreció sus condolencias a la familia del joven.

Este lamentable hecho revive preocupaciones sobre la seguridad en actividades escolares que involucran electricidad o maquinaria. En julio de este mismo año, otro estudiante, Daniel Alejandro Calero Galdámez, de 20 años, falleció en circunstancias similares durante su práctica profesional en San Francisco de Yojoa, Cortés 1.

Ambos casos subrayan la necesidad urgente de revisar y fortalecer los protocolos de seguridad en centros educativos, especialmente en eventos que implican riesgos técnicos.