El diputado Jorge Cálix posteó en X que la movilización del partido Libre a Tegucigalpa «sin retorno», significa que ya renunció a las elecciones.

Saben que su candidata está en un distante tercer lugar y temen abrir las urnas. Por eso llaman a su militancia a atrincherarse en Tegucigalpa, obligando a sus candidatos a alcaldes y diputados a abandonar la campaña.

Quieren que todos se hundan con su candidata que, desde ya, está derrotada.

Al mismo tiempo, nombran una Comisión Permanente ilegal en el Congreso. Y digo con propiedad que es ilegal porque solo puede instalarse durante los períodos de receso legislativo.

Setenta y cuatro diputados, amparados en la Constitución, extendimos el período de sesiones hasta el 20 de enero de 2026, de manera que no estamos en receso y por ende, no puede instalarse.

Libre ya renunció a las elecciones.
Saben que su candidata está en un distante tercer lugar y temen abrir las urnas. Por eso llaman a su militancia a atrincherarse en Tegucigalpa, obligando a sus candidatos a alcaldes y diputados a abandonar la campaña. Quieren que todos se…

— Jorge Cálix (@JorgeCalix) November 1, 2025

Son manotadas de ahogado. Esa comisión no puede aprobar leyes, no puede destituir funcionarios, no puede hacer declaratoria de elecciones y no puede estar por encima de la voluntad de 74 diputados. No hay mandracada que pueda sustituir la democracia ni la voz del pueblo.

Los ataques a los órganos electorales son parte de su plan para desestabilizar el país. Pero no tendrán éxito. Debemos apoyar los esfuerzos de las Consejeras Cossette López y Ana Paola Hall, así como de los magistrados Mario Flores y Miriam Barahona, quienes enfrentan cada día los ataques del gobierno y los obstáculos impuestos por Marlon Ochoa y Mario Morazán.

Todos los hondureños que creemos en la democracia sin importar colores políticos debemos unirnos en un solo propósito: que haya elecciones y que se respeten los resultados. Defender la Constitución y el voto del pueblo no es una opción, es un deber. El pueblo ya despertó. No permitirán que se robe su voz ni su futuro.