El mundo del rock está de luto. Este martes se confirmó el fallecimiento de Ozzy Osbourne, legendario vocalista de Black Sabbath, a los 76 años, rodeado del amor de su familia. La noticia fue dada a conocer por sus seres queridos a través de un comunicado que pedía privacidad en estos momentos difíciles.

Nacido como John Michael Osbourne el 3 de diciembre de 1948 en Aston, Birmingham (Inglaterra), Ozzy dejó la escuela a los 15 años y tras varios trabajos ocasionales, fundó en 1968 la banda Black Sabbath, junto a Tony Iommi, Geezer Butler y Bill Ward. Juntos marcaron un antes y un después en la historia del rock duro, dando nacimiento al género heavy metal.

Apodado el “Príncipe de las Tinieblas”, su imagen siniestra y sus escandalosas presentaciones en vivo lo convirtieron en una figura inolvidable. Una de las más recordadas fue cuando mordió la cabeza de un murciélago en el escenario, lo que cimentó su fama y controversia.

A pesar de su salud frágil y su diagnóstico de Parkinson en 2019, Osbourne ofreció su último concierto con Black Sabbath a principios de este mes en Birmingham, en un show de despedida llamado Back to the Beginning, acompañado de estrellas como Metallica, Anthrax y Guns N’ Roses.

Además de su carrera musical, se volvió una figura televisiva gracias al reality show familiar «The Osbournes» (2002–2005), que lo presentó como esposo, padre y celebridad en su vida cotidiana en Estados Unidos.

Ozzy Osbourne deja un legado musical que marcó generaciones y redefinió el sonido del rock.