La ayuda militar occidental a Ucrania cae a su nivel más bajo desde la invasión rusa


El apoyo a Kiev se encuentra en su nivel más bajo desde el inicio de la guerra, advirtió el jueves 7 de diciembre el instituto alemán de investigación Kiel, que hace balance de la ayuda militar, financiera y humanitaria prometida y entregada a Ucrania desde el comienzo de la invasión rusa el 24 de febrero de 2022.

 Hasta ahora, esta ayuda ha sido proporcionada principalmente por Estados Unidos y la Unión Europea, pero ahora es objeto de disensiones políticas, lo que obstaculiza gravemente nuevos compromisos.

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«El impulso del apoyo a Ucrania se está ralentizando. Las promesas de ayuda alcanzaron su nivel más bajo entre agosto y octubre de 2023, una caída de casi el 90% en comparación con el mismo periodo de 2022», explica el instituto, que enumera la ayuda militar, financiera y humanitaria prometida y entregada a Ucrania desde la invasión rusa del 24 de febrero de 2022.

Según los datos del Instituto de Kiel, los nuevos compromisos contraídos entre principios de agosto y finales de octubre ascendieron a 2.110 millones de euros, un 87% menos que en el mismo periodo de 2022. Se trata de la cifra trimestral «más baja» desde el inicio de la guerra.

En total, desde el comienzo de la guerra, los aliados de Ucrania y las principales organizaciones internacionales (Banco Mundial, FMI, etc.) han prometido cerca de 255.000 millones de euros en ayuda, incluidos 182.000 millones a corto plazo (ya entregada o cuya entrega está prevista en el plazo de un año). Estos compromisos incluyen 141.000 millones de euros en ayuda financiera, casi 16.000 millones en ayuda humanitaria y 98.000 millones en ayuda militar.

«Las perspectivas son inciertas”

En el periodo comprendido entre agosto y octubre de 2023, de los 42 países donantes supervisados por el instituto, «sólo 20 se han comprometido a nuevos paquetes de ayuda» y los nuevos compromisos de la Unión Europea y Estados Unidos han sido «limitados». «Las perspectivas son inciertas», afirma el instituto, «ya que el mayor compromiso pendiente -de la Unión Europea- no ha sido aprobado y la ayuda de Estados Unidos está disminuyendo».

«Dada la incertidumbre que rodea a la continuación de la ayuda estadounidense, Ucrania sólo puede esperar que la UE adopte finalmente su plan de apoyo de 50.000 millones de euros anunciado hace tiempo. Un nuevo retraso reforzaría claramente la posición de Putin», advierte Christoph Trebesch, que dirige el equipo del Instituto de Kiel encargado de supervisar la ayuda a Ucrania.

El paquete de 50.000 millones de euros previsto para consolidar el apoyo europeo a Ucrania se está viendo frenado por la reticencia de algunos países europeos a desembolsar más, al igual que el nuevo paquete estadounidense, que se está viendo frenado en el Congreso de Estados Unidos por la reticencia de los diputados republicanos. (rfi)


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