Pobladores de la Residencial San José se tomaron la carretera que conecta Tegucigalpa con el departamento de Olancho, específicamente en el kilómetro 9, en una manifestación en demanda de agua potable. Esta acción provocó caos vehicular en ambas direcciones de la vía.

Según los manifestantes, llevan un mes sufriendo la escasez de agua potable, lo que los llevó a tomar medidas drásticas. Belinda Meras, encargada del patronato de agua, instó al alcalde Jorge Aldana a asumir la responsabilidad y buscar una solución en conjunto con la comunidad afectada.

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El Gerente General de la Unidad Municipal de Agua Potable y Saneamiento (UMAPS), Arturo Tróchez, explicó que las secciones de la tubería de agua potable resultaron dañadas por la empresa constructora, que las dejó bajo pavimento y se ausentó, generando la actual situación que están tratando de resolver.

Tróchez afirmó que la empresa constructora ha sido irresponsable en su accionar, dejando las tuberías bajo concreto y evadiendo su responsabilidad.

A pesar de haber enviado pipas de agua a la zona afectada, reconoce que esta no es una solución sostenible debido a que son diez comunidades las que se ven afectadas por esta situación.

Los pobladores de la zona insisten en que no se moverán de la carretera hasta que el alcalde del Distrito Central se presente en el lugar y se resuelva la problemática. Mientras tanto, las autoridades competentes continúan buscando una solución definitiva a esta crisis que afecta a un considerable número de comunidades.

Esta situación ha generado preocupación y malestar entre los residentes de la Residencial San José y las comunidades aledañas, quienes esperan una pronta solución por parte de las autoridades correspondientes.