San José, Costa Rica — 30 de octubre de 2025. El Parlamento de Nicaragua aprobó este jueves la creación de zonas económicas especiales libres de impuestos, impulsadas por el gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo con respaldo estratégico de China, en un intento por atraer inversión extranjera y fortalecer el comercio exterior.

La iniciativa, bautizada como parte de la Franja y la Ruta, contempla exoneraciones fiscales totales en áreas como renta, dividendos, trámites aduaneros e importaciones, y busca posicionar al país como un nodo regional para empresas chinas, que ya tienen presencia en sectores como minería, transporte, infraestructura, salud y seguridad.

La medida se da en un contexto de creciente presión internacional. El gobierno de Estados Unidos, a través de su embajada en Managua, advirtió que podría suspender a Nicaragua del tratado de libre comercio con Centroamérica y aplicar aranceles de hasta el 100% a sus exportaciones, alegando “abusos sistemáticos” contra los derechos humanos.

La administración Ortega-Murillo, que rompió relaciones con Taiwán en 2021 para alinearse con Pekín, designó a Laureano Ortega, hijo de los copresidentes y asesor en temas de inversión, como responsable de dirigir las nuevas zonas especiales, con énfasis en vínculos con China y Rusia.

En paralelo, un grupo de expertos de la ONU exigió al gobierno nicaragüense rendir cuentas por presuntas violaciones graves a los derechos humanos, incluyendo crímenes de lesa humanidad. Managua rechazó los señalamientos, respaldada por aliados como China.

La decisión de Washington sobre los beneficios comerciales se espera para el 19 de noviembre, en un momento en que Nicaragua busca redefinir su modelo económico con aliados no occidentales, mientras enfrenta crecientes cuestionamientos internacionales.