
Trump invoca antigua ley contra Tren de Aragua, pero juez bloquea su decreto
Washington, Estados Unidos – El presidente Donald Trump intentó el sábado utilizar la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, una norma empleada por última vez en la Segunda Guerra Mundial, para deportar a presuntos miembros de la banda venezolana Tren de Aragua, a la que calificó de «enemigos extranjeros». Sin embargo, su decreto fue suspendido por un juez federal.
Trump, quien ha prometido una dura política migratoria, emitió una orden ejecutiva que declaraba a la banda transnacional, designada como «organización terrorista» por EE.UU., una amenaza vinculada al régimen de Nicolás Maduro. En su proclama, la Casa Blanca afirmó que el Tren de Aragua «está llevando a cabo una guerra irregular contra el territorio de Estados Unidos», describiéndolo como «un Estado criminal híbrido» que perpetra «una invasión depredadora».
La medida, que otorgaba a la fiscal general Pam Bondi 60 días para implementarla, ordenaba la «aprehensión inmediata, detención y expulsión» de los miembros venezolanos de la banda mayores de 14 años, excluyendo a ciudadanos naturalizados o residentes legales permanentes. Bondi defendió la acción, pero criticó la decisión judicial, afirmando que «ignora la autoridad del presidente Trump y pone en riesgo al público y a las fuerzas del orden».
El juez James Boasberg suspendió el decreto por 14 días, mientras delibera sobre el caso. La Casa Blanca tiene hasta el lunes para apelar la pausa; de lo contrario, la próxima audiencia será el 21 de marzo. La ley invocada, usada históricamente en conflictos como la Guerra de 1812 y para internar a japoneses en la Segunda Guerra Mundial, otorga al presidente poderes excepcionales en tiempos de guerra, un argumento que Trump buscó aplicar al crimen organizado y la migración.