El exjefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas de Honduras, Romeo Vásquez Velásquez, prófugo de la justicia, calificó este viernes al fiscal general Johel Zelaya como «fiscal de juguete».

En un video difundido desde una ubicación montañosa no revelada, Vásquez acusó a Zelaya de fabricar pruebas falsas, violar el debido proceso y cometer arbitrariedades contra ciudadanos inocentes.

Además, criticó la inseguridad en el país, la falta de inversión y la ausencia de investigaciones sobre la masacre de más de 40 mujeres en la cárcel de Támara y las acciones de Carlos Zelaya, cuñado de la presidenta Xiomara Castro, vinculado a una reunión con narcotraficantes en 2013. Vásquez señaló que los operadores de justicia sirven a un «régimen totalitario» en lugar de proteger al pueblo.

Vásquez enfrenta acusaciones por el homicidio de Isy Obed Murillo y el intento de homicidio contra Alex Roberto Zavala durante las protestas tras el golpe de Estado de 2009 contra Manuel Zelaya.

Las autoridades ofrecen 3.5 millones de lempiras por información para su captura. Desde su escondite, Vásquez insiste en su inocencia y acusa al gobierno del partido Libre de perseguirlo por venganza política.

En respuesta, Johel Zelaya defendió su labor, afirmando que trabaja por el bienestar del país y que no es un «funcionario de doble moral». Instó a Vásquez a aclarar un incidente ocurrido el 24 de noviembre de 2013, sin dar detalles por estar bajo investigación.

Zelaya aseguró que el Ministerio Público presentará pruebas en los tribunales y que quienes defienden a Vásquez «terminarán avergonzados».

Otros implicados en el caso, como los generales retirados Venancio Cervantes y Carlos Roberto Puerto, permanecen en prisión tras la revocación de sus medidas de arresto domiciliario.