Asfura realizará un acto de traspaso austero y simbólico; no será en el Estadio Nacional


La designada presidencial electa, María Antonieta Mejía, confirmó este viernes que el presidente electo Nasry Asfura decidió no realizar el acto de traspaso de mando en el Estadio Nacional, rompiendo con la tradición de las últimas administraciones.

Mejía explicó que Asfura optará por un evento protocolario austero, simbólico y de bajo presupuesto, en coherencia con su estilo personal y con la línea de austeridad que ha prometido para su gobierno.

“Asfura no es una persona suntuosa ni aficionada a eventos protocolares costosos. Prefiere que esos recursos se reorienten a actividades que beneficien directamente al pueblo hondureño”, señaló la designada presidencial electa.

Un cambio significativo respecto a ceremonias anteriores

En años anteriores, el Estadio Nacional había sido el escenario tradicional para la toma de posesión presidencial, con montajes de gran escala, invitados internacionales y despliegues logísticos de alto costo.
La decisión de Asfura marca un giro hacia un formato más sobrio, centrado en el acto constitucional y no en la producción ceremonial.

Austeridad como mensaje político

Mejía subrayó que el presidente electo busca enviar un mensaje claro sobre el uso responsable de los recursos públicos, especialmente en un contexto económico desafiante.

“El compromiso es con la eficiencia, la transparencia y el buen uso de las arcas del Estado”, afirmó.

Detalles del evento aún en planificación

Aunque no se ha confirmado el lugar exacto donde se realizará la ceremonia, fuentes cercanas al equipo de transición indican que se evalúan espacios institucionales que permitan un acto formal, seguro y de bajo costo.

El nuevo gobierno asumirá funciones el 27 de enero de 2026.


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