Un gol de Raphinha en el minuto 61 le dio una importante victoria al FC Barcelona en su visita al Estadio da Luz, donde derrotó 1-0 al Benfica en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones.

El triunfo cobra aún más valor para los blaugranas, que jugaron con un hombre menos desde el minuto 22 tras la expulsión de Pau Cubarsí.

Hasta ese momento, el Barcelona había controlado el partido con autoridad, mostrando superioridad en posesión y generando las mejores ocasiones del encuentro. Sin embargo, la dinámica cambió drásticamente tras la roja directa al joven lateral español, obligando al equipo de Hansi Flick a replegarse y ajustar su estrategia.

Szczęsny evita el gol barcelonista

Con un jugador menos, el Barça tuvo que reorganizarse defensivamente mientras intentaba mantener el peligro en ataque. Wojciech Szczęsny, portero del Benfica, se convirtió en figura clave del partido, especialmente en la segunda mitad, con varias intervenciones decisivas para evitar que los visitantes abrieran el marcador antes de tiempo.

Raphinha decide el partido

Cuando parecía que el Benfica lograría mantener el empate, Raphinha apareció para inclinar la balanza a favor del Barcelona. En una de las pocas ocasiones claras del segundo tiempo, el extremo brasileño remató raso desde la frontal del área, superando a Szczęsny con un disparo preciso que significó el único tanto del encuentro.

Este gol no solo aseguró la victoria parcial para los culés, sino que también les otorga una valiosa ventaja de cara al partido de vuelta en el Camp Nou, donde buscarán sellar su pase a los cuartos de final.

Una victoria de carácter

A pesar de las dificultades impuestas por la inferioridad numérica, el Barcelona demostró carácter y disciplina táctica para resistir la presión del Benfica en los minutos finales. La solidez defensiva, liderada por Andreas Christensen e Ilkay Gündogan, fue clave para mantener el resultado a favor.

El técnico Hansi Flick destacó tras el partido la entrega de sus jugadores: «Fue un partido muy difícil, pero mostramos personalidad y coraje. Sabíamos que teníamos que sufrir, pero el equipo respondió de manera admirable».

El próximo capítulo en el Camp Nou

La eliminatoria queda abierta, aunque el Barcelona parte con ligera ventaja gracias a este triunfo en Lisboa. El partido de vuelta se disputará en el Camp Nou dentro de dos semanas, donde los azulgranas buscarán certificar su clasificación a la siguiente fase.

Por su parte, el Benfica deberá remontar si quiere seguir vivo en la competición, aunque el desafío parece complicado ante un Barcelona que ha demostrado capacidad para gestionar situaciones adversas.

Con esta victoria, el Barcelona refuerza su candidatura como uno de los equipos a tener en cuenta en la presente edición de la Champions League, mientras que el Benfica tendrá que darlo todo en territorio español si quiere seguir soñando con avanzar en el torneo continental.