El primer ministro y el presidente del partido Camp State llegan a un acuerdo por la constitución de un gobierno de emergencia. Se lanzaron bombardeos contra Gush Dan y el sur, y sonó la alarma en la Asamblea Nacional. La central eléctrica de Gaza fue cerrada por completo y se cortó la electricidad en los pabellones de seguridad de las prisiones. En el norte, Hezbolá amenaza con un nuevo frente de batalla.

El primer ministro Benjamín Netanyahu y el presidente del Camp State, Benny Gantz, anunciaron en una declaración conjunta tras su reunión la creación de un gobierno de emergencia y un gabinete de gestión de guerra. Como parte del acuerdo, se formará un «gabinete de gestión de guerra» compuesto por tres miembros: el primer ministro, el ministro de defensa y Gantz.

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Además, el coronel (resp.) Gadi Eisenkot y el ministro Ron Dermer actuarán como observadores.

Por parte del Camp State, se añadirán al gabinete político y de seguridad un total de cinco ministros sin cartera (uno de ellos como observador): Benny Gantz, Gideon Sa’ar, Gadi Eisenkot y otros dos ministros.

También se informó que se reservará un lugar en el gabinete de gestión de la guerra para el otro líder de la oposición, Yair Lapid, en caso de que pida unirse. Según la declaración, no se promoverán proyectos de ley ni decisiones gubernamentales que no pertenezcan a la gestión de la guerra.

Antes, el presidente Isaac Herzog visitó Sderot y se reunió con el alcalde Alon Davidi, con voluntarios del centro de llamadas municipal y de la organización Zaka, con el comandante adjunto de la policía de la ciudad, Dvir Arobs, y con las fuerzas de las FDI estacionadas en la ciudad.

«Lo que vemos en Sderot es el heroísmo inimaginable de un pueblo, que se levantó de un terrible ataque que le fue impuesto en su festividad, y los enormes poderes que emanan de él son impresionantes», sostuvo Herzog.

«Ver a los voluntarios, los soldados, policías, rescatistas, trabajadores sociales, todos se movilizan como uno solo, con un solo corazón», agregó.

«Es importante decir que el proceso de construcción y reconstrucción se llevará a cabo; será una obligación suprema del Estado de Israel cuidar esta zona, desarrollarla, fortalecerla, infundir fuerza y ​​fortaleza mental entre los residentes y darles seguridad absoluta», cerró el presidente.

Continúa la guerra

El Ministerio de Salud informó que como parte de los preparativos del sistema de salud y hospitales ante posibles novedades en la situación de seguridad, se están trasladando pacientes desde hospitales del norte del país a otros del centro. Esto es para permitir evaluaciones y preparación de los hospitales en el frente norte para cualquier desarrollo futuro que pueda ocurrir.

Además, un misil cayó sobre el hospital Barzilai de Ashkelon.

Según las últimas informaciones, el Consejo Regional de Eshkol pidió a sus residentes que por temor a un incidente de seguridad, ingresen a espacios seguros. Además, los paramédicos del Servicio de Ambulancias Magen David Adom brindaron primeros auxilios a cuatro víctimas de ataques masivos con cohetes en el distrito de Gush Dan y HaShfela .

Israel confirmó en los últimos minutos que la central eléctrica de Gaza fue completamente destruida y que ya no había más electricidad en la Franja de Gaza, seguida del cierre de suministro de agua.

Además, el Ministerio de Salud palestino en Gaza actualizó el número de muertos por ataques de las FDI desde el comienzo de los combates a 1.055. Mientras que 5.184 residentes de la Franja resultaron heridos.

Por su parte, el Ministro de Asuntos Exteriores de Gran Bretaña, James Calverley, llegó en visita de solidaridad a Israel por la tarde. Al mismo tiempo, el parlamento alemán guardó un minuto de silencio en memoria de al menos 1.200 víctimas israelíes que fueron asesinadas.

Antes, las ciudades del sur de Israel fueron atacadas este miércoles por una intensa descarga de cohetes lanzados desde Gaza contra Ashkelon y Ashdod.

Los terroristas llevaban lanzando cohetes contra las comunidades de la zona fronteriza de Gaza desde primeras horas de la mañana, lo que mantuvo a los residentes confinados en sus refugios.

El grupo terrorista Hezbolá, respaldado por Irán, disparó el miércoles granadas de mortero contra Israel mientras que las FDI atacaron el sur del Líbano en respuesta.

En Gaza, la Fuerza Aérea bombardeó la Universidad Islámica, lugar donde «se formaban ingenieros de Hamás», según el Ejército.

Por otro lado, Israel disparó su mayor proyectil de artillería contra objetivos de Hamás, capaz de atravesar de un lado a otro la Franja de Gaza. El proyectil tiene un alcance de hasta 40 kilómetros y no se utilizaba desde la Segunda Guerra del Líbano de 2006.

El portavoz de las FDI sostuvo que Hamás tenía la intención de conquistar comunidades de la zona fronteriza y confirmó que más de 1.200 israelíes murieron desde el ataque asesino de Hamás del sábado y que los terroristas de Gaza lanzaron 5.000 cohetes contra ciudades y comunidades israelíes.

En respuesta, Israel atacó más de 2.300 objetivos en la Franja de Gaza y durante la noche, lanzó 200 ataques contra el barrio de Al-Furqan, conocido «centro neurálgico» de Hamás.

«Este es el tercer ataque en las últimas 24 horas, y más de 450 objetivos fueron alcanzados en el barrio que es un foco de terrorismo desde el que Hamás lanzó gran parte de sus ataques contra Israel», según las FDI.

Los palestinos informaron que los ataques israelíes mataron durante la noche al hermano de Mohammed Deif, jefe del ala militar de Hamás, y a miembros de su familia, entre ellos su hijo y su nieta. Hay otras personas atrapadas entre las ruinas de la vivienda, en el sur de la Franja de Gaza.

Estados Unidos estaba intentando garantizar la evacuación de los palestinos estadounidenses de Gaza a través de un corredor humanitario hacia Egipto, según informó la cadena NBC a primera hora del miércoles. Según el informe, el presidente estadounidense, Joe Biden, instó al primer ministro, Benjamin Netanyahu, a evitar víctimas civiles en las incursiones en la Franja.

Mientras tanto, el ministro de Defensa Yoav Gallant caminó la región fronteriza de Gaza el martes por la noche y habló con soldados sobre el terreno. «He levantado todas las restricciones; hemos tomado el control del sector y estamos pasando a un ataque a gran escala», aseguró el alto mando

«Estuvieron valientemente en primera línea, golpearon a muchos terroristas y salvaron vidas. Vieron de primera mano contra lo que estamos luchando: bestias humanas, el Estado Islámico de Gaza. Gracias a sus heroicas acciones en esta misión de defensa, tienen el honor de cambiar la realidad», dijo a las tropas.

«Hamás quería un cambio en Gaza, cambiará 180 grados respecto a lo que pensaban. Lamentarán este momento: Gaza no volverá a ser lo que era», sumó.

El ministro de Defensa añadió: «No habrá una situación en la que niños israelíes sean asesinados en los campos y Hamás siga existiendo. Eliminaremos a todo el que luche contra nosotros, utilizando todos los medios. Quien venga a decapitar, a asesinar mujeres, supervivientes del Holocausto… lo aniquilaremos».

Mientras tanto, el Ministerio de Salud informó de que 535 personas estaban hospitalizadas en todo Israel con heridas sufridas en el ataque de Hamás.

Según los informes, una de ellas se encontraba en estado crítico, 105 en estado grave, 262 en estado moderado y 167 en estado leve.

Hasta el momento, 2.901 personas han sido ingresadas en hospitales de todo el país con heridas sufridas en el ataque.

Anteriormente, se habían disparado catorce cohetes desde Líbano hacia el norte de Israel, lo que hizo sonar las sirenas antiaéreas en la región de Galilea Occidental; cuatro de ellos fueron interceptados por los sistemas de defensa antiaérea israelíes y otros diez se estrellaron en zonas despobladas.

l ejército respondió con fuego de artillería, alcanzando dos grandes puestos de observación de Hezbolá. El canal de televisión libanés Al-Mayadin, afiliado al grupo terrorismo, informó de que se habían disparado tres salvas de cohetes contra el norte de Israel.

Las FDI hicieron públicos el martes por la noche los nombres de otros dos soldados israelíes que murieron en el enfrentamiento. El sargento de primera clase Joad Aamar, de 23 años, de Hurfeish, y el sargento de primera clase (res.) Gilad Molkho, de 33 años, de Tel Aviv, soldado de Egoz.

Mientras tanto, dos trabajadores extranjeros murieron en la región de Eshkol, cerca de la frontera con Gaza, el martes por la tarde, por un cohete disparado desde el enclave palestino.(ynetespanol.com)