El consejero del Consejo Nacional Electoral (CNE), Marlon Ochoa, compareció este viernes ante la comisión especial del Congreso Nacional que investiga los incidentes logísticos del 9 de marzo, generando un fuerte contrapunto con las declaraciones de su colega Cossette López (Partido Nacional), quien la víspera había afirmado que “no existen condiciones” para montar las elecciones generales.

La comisión, conformada el 22 de marzo por orden del presidente del Legislativo, Luis Redondo, busca determinar las causas del retraso en la entrega de maletas electorales en Tegucigalpa y San Pedro Sula, así como fallos en la coordinación con las Fuerzas Armadas.

Durante su intervención, Ochoa —designado por Libre— solicitó a López que rectifique sus palabras o explique sus motivos:

“Es necesario reflexionar sobre esas declaraciones y, de no hacerlo, explicar por qué se quiere generar zozobra e incertidumbre”, reclamó.

El consejero anunció además que pondrá a disposición de la comisión documentación detallada sobre los retrazos en la distribución del material electoral, y defendió el papel de la institución castrense:

“Ni Cossette ni Ana Paola Hall pueden responsabilizar a las FF.AA.; tuvieron un cumplimiento adecuado conforme al convenio suscrito”, aseguró.

La tensión entre los tres miembros del pleno del CNE —López, Ana Paola Hall (Partido Liberal) y Ochoa— se ha ido agudizando desde las primarias, poniendo en riesgo la confianza ciudadana en el organismo a pocos meses de los comicios del 30 de noviembre.

Más temprano, Ochoa utilizó X para rechazar el “bipartidismo”:

“La incompetencia manifestada por el bipartidismo no es excusa para impedir unas elecciones. El CNE tiene el deber constitucional ineludible de dirigir elecciones generales”, escribió.

En un video posterior, el consejero subrayó:

“En noviembre habrá elecciones limpias, libres y respetuosas de la voluntad popular. Ninguna opinión individual puede debilitar ese compromiso colectivo”.

La comisión legislativa continuará con nuevas audiencias en los próximos días, mientras la presión aumenta para esclarecer los fallos del proceso primario y garantizar la credibilidad de las elecciones generales.