
El Congreso de Colombia investiga a Petro por supuesto nexo con los narcos
Bogotá, Colombia. Una comisión legislativa del Congreso colombiano ha iniciado una investigación preliminar contra el presidente Gustavo Petro para examinar supuestos vínculos con redes del narcotráfico.
La decisión ha sido anunciada en un clima de crecientes tensiones políticas y signos de fractura institucional en un país con polarización inédita.
Acusaciones en el Entorno Cercano al Mandatario
La investigación se basa en acusaciones de un posible problema relacionado con drogas. Según los primeros informes, la comisión busca esclarecer denuncias que apuntan a personas del entorno cercano al mandatario que estarían relacionadas con organizaciones criminales que, según se indica, operarían en Colombia.
Aunque hasta el momento no se han presentado pruebas directas contra el presidente Petro, el caso ha generado un fuerte revuelo mediático y ha reavivado los cuestionamientos sobre el manejo del gobierno en temas de seguridad y justicia.
Varios congresistas opositores impulsaron la solicitud de investigación, alegando la existencia de elementos suficientes para iniciar un proceso de escrutinio político.
La comisión ya ha comenzado a recopilar testimonios y documentos. Este procedimiento podría escalar a una eventual moción de censura o incluso un juicio político, dependiendo de los hallazgos que surjan de la investigación.
Petro Responde Denunciando un «Intento de Golpe de Estado»
Frente a este escenario, el presidente Gustavo Petro rompió el silencio con un duro pronunciamiento.
En una declaración pública, el mandatario denunció un intento de golpe de Estado promovido por sectores de la extrema derecha, tanto en Colombia como en el exterior.
A través de un mensaje en su cuenta de «X», Petro afirmó que la investigación forma parte de una «ofensiva regional contra el progresismo». El presidente colombiano evocó ejemplos de otros líderes de izquierda en América Latina. «Presidentes como Lula, Pedro Castillo, Cristina Kirchner, Rafael Correa, Dilma Rousseff, Zelaya, López Obrador, Evo Morales… todos han pasado por procesos injustos, cárcel o golpes de Estado», señaló.
El mandatario expresó su solidaridad con la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner, «que va en camino a la prisión», y advirtió que la «primavera democrática de América Latina está en peligro».
Asimismo, criticó a los «centros de poder» por promover gobiernos de extrema derecha y fomentar rupturas democráticas en la región.
Petro también aseguró que en Colombia «ya se pregona un golpe de Estado, y no es discurso». Afirmó que existen grabaciones de reuniones entre actores de derecha y figuras en Estados Unidos con el objetivo de derrocarlo, y sugirió que esos audios deberían hacerse públicos.
Concluyó reafirmando su compromiso de seguir gobernando dentro del Estado Social de Derecho, sin retroceder en la lucha por la justicia social y los derechos del pueblo colombiano, y prometió responder «con la unidad pacífica pero contundente del pueblo».